Vie 19 Jul 2024
Masivo acompañamiento a monseñor Édgar Aristizábal Quintero durante su posesión como nuevo obispo de la Diócesis de Duitama-Sogamoso
En la mañana de este viernes, 19 de julio, tras haber pastoreado durante siete años la Diócesis de Yopal, monseñor Edgar Aristizábal Quintero, tomó posesión canónica de la Diócesis de Duitama-Sogamoso. El acto litúrgico se celebró en la Catedral San Lorenzo Mártir del municipio de Duitama. Como signo de fraternidad y comunión, en este momento especial, al prelado lo acompañaron 26 obispos de diferentes regiones del país. El Nuncio Apostólico, monseñor Paolo Rudelli, presidió el rito. Varios familiares, cerca de 130 sacerdotes, los diáconos, religiosos, religiosas de la diócesis; autoridades municipales y cientos de fieles, acogieron masivamente a su nuevo pastor. Monseñor Edgar Aristizábal se convierte en el sexto obispo de esa diócesis que peregrina en 24 municipios de Boyacá.Al obispo le fue asignado este nuevo encargo pastoral por parte del papa Francisco el pasado 24 de mayo. Por designación del Colegio de Consultores, desde el 03 de marzo de 2023, era el padre Óscar Iván Pinzón Bonilla, quien ejercía como administrador de esa jurisdicción. Esto, luego de que monseñor Misael Vacca Ramírez, anterior obispo de Duitama-Sogamoso, fuera nombrado Arzobispo de Villavicencio por parte del pontífice.Al introducir la celebración, el padre Óscar Pinzón, le dio la bienvenida al nuevo obispo y lo contextualizó sobre la riqueza social, comunitaria y pastoral de esa Iglesia particular. Destacó la profunda religiosidad popular que allí se vive “a flor de piel”. Afirmó que llega a una diócesis que ha insistido mucho durante los últimos años la necesidad de misionar.“Si este tiempo de sede vacante hasta su llegada fue vivido como un Adviento por la Iglesia diocesana, esperamos que este nuevo amanecer sea todo un “kairós”. Precisamente como tiempo de gracia hemos vivido estos días de espera que nos han separado de su llegada. La Providencia nos ha permitido conocer por primera vez en nuestra historia, el ministerio de un administrador diocesano, el aquí suscrito en esta administración. Y hemos aprendido a caminar colegiadamente, hoy diríamos sinodal. Este ejercicio me ha permitido personalmente con figurarme más aún con Jesucristo, Pastor de misericordia, por medio de la escucha y de la paciencia, sobre todo de la paciencia. Quisiera agradecer a mis hermanos presbíteros y de manera especial al Colegio de Consultores. Pido perdón por las faltas cometidas y me pongo a disposición de mi nuevo pastor”, expresó el presbítero.Previo a lectura de las letras apostólicas con las cuales el papa Francisco comunica solemnemente el nombramiento de monseñor Edgar como obispo de Duitama-Sogamoso, el Nuncio Apostólico en Colombia, monseñor Paolo Rudelli, compartió un saludo en representación del Santo Padre. Invitó a los miembros de esa Iglesia particular a acoger a su nuevo obispo y a trabajar junto a él con generosidad, en armonía y comunión eclesial. Destacó, de manera especial, el acompañamiento de los demás obispos en la ceremonia.“Es un momento sencillo, pero de profunda comunión eclesial. La Iglesia está fundada sobre la fe de los apóstoles. Es el sucesor del apóstol San Pedro, el papa Francisco, quien, en virtud de su primado, confía a monseñor Edgar esta porción del pueblo de Dios para que la pastoree en nombre de Cristo. La presencia de todos los señores obispos nos dice que este ministerio se desarrolla en el marco de una comunión que se expande a la Iglesia de esta región de Boyacá”.En la homilía, tras saludar y agradecer a los presentes, monseñor Edgar afirmó que asume con fe, humildad y obediencia la nueva misión que se le ha encomendado en esa Iglesia boyacense. Recordó la esencia de la vocación que tenemos todos, como hijos de Dios, discípulos y cristianos, así como la necesidad de trabajar por la vida y la dignidad. “La historia de salvación es bellísima. Dios sigue actuando y hoy se hace presente cuando pone su mirada en esta iglesia particular y me pide a mí como obispo y pastor, venir a acompañar esta porción del pueblo de Dios. Vengo con fe, con humildad, en obediencia. Y en comunión con todos. Seguir esta gran tarea, este gran reto evangelizador. Por eso les invito para que, a la luz de la Palabra de Dios, pensemos una y otra vez aquí no hay que inventar cosas, porque ya la gracia está dada. Es simplemente recordar ese gran compromiso que tenemos como discípulos y como testigos de Cristo en esa gran misión, en este camino sinodal, como insiste una y otra vez el Santo Padre, el papa Francisco”, anotó el obispo.El prelado también centró su reflexión en la necesidad de seguir a Jesús, Buen Pastor, ayudando en el anuncio del Reino; en la comunión, en la celebración de fe, en el servicio de la caridad; además, en la importancia de seguir caminando juntos con actitud sinodal.“El Buen Pastor conoce a sus ovejas y a cada una las llama por su nombre. “Él hizo de mi boca una espada muy afilada”: El Señor no solo nos da un nombre y nos llama, sino que nos equipa para la tarea. La tarea a la que nos llama, es a armarnos con la espada de la Palabra a anunciarle. Porque el reino de Dios es una realidad que se anuncia; se anuncia sin miedo, con alegría, con esperanza, con valentía, sacudiéndonos el cansancio, el desánimo y las decepciones; se anuncia con la palabra y con la vida; se anuncia con la obediencia”, agregó monseñor Aristizábal.Como lo hizo al final de su homilía, previo a su llegada a la Diócesis de Duitama-Sogamoso, monseñor Edgar Aristizábal compartió algunos detalles de su vida personal, vocación y servicio pastoral con el equipo de comunicaciones de la Diócesis de Yopal. Allí, además de agradecer a todos los miembros de la Iglesia que peregrina en el Casanare, los animó a seguir adelante y se encomendó a sus oraciones:“Esta es una región maravillosa, de muchas posibilidades, no dejemos apagar esa gracia de Dios. Trabajemos, cada vez más, por las familias, por los jóvenes y los niños, aún tenemos esa experiencia de amor y de fe. Los animo a seguir y les pido que recen por mí, para que Dios me siga ayudando en esta bella misión, porque nosotros no nos hacemos, ni diáconos, ni sacerdotes, ni obispos, para servirnos; sino para servir en nombre de Cristo, Buen Pastor, a la humanidad y para, con la gracia del Espíritu Santo, llevar ese mensaje al mundo entero”. Vea a continuación la transmisión de la posesión canónica de monseñor Edgar Ariatizábal Quintero en la Diócesis de Duitama-Sogamoso: