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ingobernabilidad

Mié 7 Feb 2018

La riqueza de la Guajira sigue postrada ante la corrupción

"Para nadie es un secreto la ingobernabilidad total que se vive en esta región del país. Situación que dificulta los procesos de desarrollo del departamento de la Guajira y que prende las alarmas para que los ciudadanos en esta época preelectoral, voten a conciencia y escuchen la voz de la Iglesia", así lo manifesto el obispo de Riohacha, Monseñor Héctor Salah Zuleta. Recordemos que, en los últimos años, siete gobernadores de la Guajira han tenido problemas judiciales quedando inhabilitados. Situación que tiene paralizado el departamento, por la falta de autoridad competente y honesta. Se suma a esta calamidad política la falta de agua por las sequías en la región y por ende la escasez de alimentos para sus habitantes. La ruta de mafias y la corrupción desbordada que ha permeado a dirigentes locales y a autoridades, más factores culturales que ponen lo ilegal como modelo y la falta de presencia del Estado, son ingredientes de postración que vive este departamento. Sin embargo, la Iglesia allí presente por medio la diócesis de Riohacha, creada hace 30 años, le apunta a los procesos educativos y a la evangelización en esta región con la presencia y apoyo también de comunidades religiosas. Rioacha, un pequeño Miami La Iglesia denuncia, evangeliza, alerta y por supuesto trabaja con la educación en estratos 0,1 y 2, dirigidos por educadores laicos, sacerdotes y religiosas. Educación directa de 15.000 niños en colegios públicos, pero con la calidad de instituciones privadas. El futuro está a través de la educación. Es definitivamente la esperanza de un renacer de esta región, tan hermosa y potencialmente turística, con tanta riqueza, es además la meca de energías renovables. “Podría ser Rioacha, por ejemplo, un pequeño Miami”, afirma monseñor Héctor Salah Zuleta, obispo de Riohacha. En las homilías, monseñor Salah recalca puntualmente todos los vicios que se manejan entorno a los procesos electorales, habla a la comunidad sin tapujos y advierte de la corrupción que se mueve en torno a las elecciones que se aproximan. Perseverar, denunciar, orar y evangelizar, aunque los procesos sean lentos, son las premisas de la Iglesia representadas por la diócesis de Riohacha en este departamento regido por altos índices de corrupción, alianzas de autoridades, políticos y grupos ilegales. Veamos, a continuación, la entrevista completa con monseñor Héctor Salah Zuleta, quien ratifica esta realidad: Fuente: Oficina de comunicaciones Arquidiócesis de Bogotá