Mié 23 Oct 2024
"No solo se está destruyendo el planeta sino también la convivencia": Nuncio Apostólico en Colombia sobre la importancia de la COP16
Aunque la Santa Sede no hace parte del listado de Estados miembros de Naciones Unidas y, por tanto, no toma decisiones en el Convenio sobre Diversidad Biológica a partir del cual se desarrolla la COP16, sí estará presente como Estado Observador, condición que le fue otorgada desde el 6 de abril de 1964. En la actualidad, el arzobispo observador vaticano es monseñor Gabriele Caccia. Entre tanto, el Nuncio Apostólico en Colombia, monseñor Paolo Rudelli, participará en varios espacios de esta importante reflexión mundial bajo el propósito central de hacer eco de los aportes de la Iglesia Católica, especialmente de los llamados del papa Francisco, frente a la urgencia de la ecología integral.El representante diplomático del Vaticano afirmó que la voz de la Santa Sede es una voz que apela a los valores que deben estar en el fondo de esta convención. Recordó que se trata de algo mucho más profundo que cuidar la naturaleza porque la crisis que se empieza a percibir hoy no es solo ecológica. “El papa Francisco en Laudato si' nos ha mostrado que no solo se trata, claro, es importante, de cuidar la naturaleza, pero eso es parte de una respuesta a una crisis que no es solo ecológica, sino que es una crisis del sistema económico, es una crisis antropológica, es una crisis espiritual. Es decir, cuando el hombre pone al centro de su interés solo el desarrollo económico, solo el tener siempre más, el consumir siempre más, no solo vamos destruyendo el planeta, vamos destruyendo nuestra convivencia, esto lo estamos viendo ahora con las guerras”.Monseñor Rudelli ratificó que el interés de la Iglesia en los temas que se abordan por estos días en la COP16 transciende mucho más allá de la conversación del momento “porque la Casa Común es un reflejo para nosotros de inteligencia y de la belleza del Creador, de Dios. Y si nosotros no la cuidamos, no cuidamos ese plan de Dios”.El Nuncio Apostólico afirmó que será fundamental en estos espacios poder “testimoniar” el trabajo que las Iglesias en todo el mundo están adelantando desde hace varias décadas, especialmente en América del Sur y en Colombia, por el cuidado del medio ambiente. En este sentido, destacó la importancia de aquellos organismos que en el continente han enfocado su misión en estos temas específicos. Entre ellos, la Red Eclesial PanAmazonica (REPAM), la Red Eclesial Ecológica Mesoamericana (REMAM) y la Conferencia Eclesial de la Amazonía (CEAMA), que estarán presentes en la COP16.“Justamente después de la Laudato si' y recogiendo ahí también un trabajo que ya se venía haciendo, han surgido organismos que son de la Iglesia Católica, como la REPAM, como CEAMA que quieren poner ese tema. Por un lado, ponerlo a la atención de la Iglesia universal y por otro lado coordinar un poco lo que se hace en distintas regiones, distintas iglesias de países que a veces, a lo mejor, no conocen lo que está haciendo el otro, Brasil lo que está haciendo Colombia, Colombia, lo que está haciendo Ecuador o Perú, pero que todos trabajan en un conjunto que tienen ese bioma, tienen un medio ambiente común que también nos da una tarea común como Iglesia. Entonces creo que la creación de estos ha sido una realidad muy importante y seguirá siéndolo en el futuro, para también darnos como Iglesia Universal una idea de conjunto de esa cuestión”.El representante del papa Francisco en Colombia también pidió a los fieles y a las comunidades para que hagan parte de las iniciativas de adelantan las diferentes pastorales sociales y organismos en esta dimensión; y también, hizo un contundente llamado a la acción a los Estados:“Un llamado a las autoridades para que todas esas, esos temas, esos valores que percibimos de la biodiversidad, del cuidado de la Casa Común, se vuelvan en políticas de Estado, eso es muy importante; porque es importante el trabajo de las ONG, el trabajo de la Iglesia, de otras confesiones cristianas, pero no se puede alcanzar resultados si no hay también una política de Estado. Es decir, que la comunidad, en su conjunto, toma la responsabilidad por la tutela de la biodiversidad y por el cuidado de la Casa Común”.Vea a continuación el mensaje del Nuncio Apostólico en Colombia: