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mes de la biblia

Mar 9 Sep 2025

El don de la Palabra de Dios

Por Pbro. Francisco León Oquendo Góez - Septiembre es el mes de la Biblia, ya que el 30 de dicho mes se celebra la memoria de San Jerónimo (muerto el 30 de septiembre del 420) quien, mediante su vida y sus obras, dejó a la Iglesia como herencia “una estima por la Sagrada Escritura, un amor vivo y suave por la Palabra de Dios escrita”, como escribió el Papa Francisco, en Scripturae sacrae affectus (SSA).La Palabra de Dios es “don del Padre, para el encuentro con Jesucristo vivo” (Aparecida 248). Existe la Biblia, porque existe la Palabra de Dios, la revelación de Dios, pues “quiso Dios revelarse a Sí mismo y manifestar el misterio de su voluntad” (DV 2). En Cristo, la Palabra hecha carne, Dios se revela mediante obras y palabras intrínsecamente ligadas (VD 2), puesto que Cristo “lleva a plenitud toda la revelación y la confirma con testimonio divino” (DV 4).La revelación salvadora, la salvación revelada es para todos. Es voluntad de Dios que lo revelado “se conservara íntegro y fuera transmitido a todas las edades” (DV 7), de manera que la “predicación apostólica se ha de conservar por transmisión continua hasta el fin del tiempo” (DV 8). La revelación fue transmitida de dos maneras: oralmente y por escrito (CEC 76). La transmisión oral es la Tradición viva, la cual “recibe la palabra de Dios, encomendada por Cristo y el Espíritu Santo a los Apóstoles y la transmite íntegra a los sucesores” (DV 9), pues “la Iglesia con su enseñanza, su vida, su culto, conserva y transmite a todas las edades lo que es y lo que cree” (DV 8), Tradición que es atestiguada por las palabras de los Santos Padres (DV 8) y es “la que nos hace comprender de modo adecuado la Sagrada Escritura como Palabra de Dios” (VD 17).La transmisión por escrito es la Sagrada Escritura que es “Palabra de Dios escrita por inspiración del Espíritu Santo” (DV 9). En efecto, “los mismos Apóstoles y otros de su generación pusieron por escrito el mensaje de la salvación inspirados por el Espíritu Santo” (DV 7). Por ello, “en la Iglesia se venera la Sagrada Escritura, aunque la fe cristiana no es una ‘religión del libro’, pues el cristianismo es la religión de la Palabra de Dios, no de una palabra escrita y muda, sino del Verbo encarnado y vivo” (VD 7).Así pues, “la Tradición y la Escritura están estrechamente unidas y compenetradas, manan de la misma fuente, se unen en un mismo caudal, corren hacia el mismo fin” (DV 9) y “constituyen el depósito sagrado de la Palabra de Dios, confiado a la Iglesia” (DV 10). Dios no sólo dona su Palabra, sino también el carisma para interpretarla, pues la interpretación por cuenta propia está excluida por la Escritura misma (2Pe 1,20). Por ello, “el oficio de interpretar auténticamente la Palabra de Dios, oral o escrita, ha sido encomendado únicamente al Magisterio de la Iglesia, el cual lo ejercita en nombre de Jesucristo” (DV 10), es decir, “a los obispos en comunión con el sucesor de Pedro, el obispo de Roma” (CEC 85). En consecuencia, “la Tradición, la Escritura y el Magisterio de la Iglesia están unidos y ligados, de modo que ninguno puede subsistir sin los otros; los tres, cada uno según su carácter, y bajo la acción del único Espíritu Santo, contribuyen eficazmente a la salvación de las almas” (DV 10).El mes de la Biblia renueve el amor ardoroso y el ardor amoroso a la Sagrada Escritura, pues “la Escritura ha de ser proclamada, escuchada, leída, acogida y vivida como Palabra de Dios, en el seno de la Tradición apostólica, de la que no se puede separar” (VD 7). La sinodalidad enfatiza que la Escritura se ha de leer en la comunión eclesial. En efecto, “san Jerónimo recuerda que nunca podemos leer solos la Escritura. Encontramos demasiadas puertas cerradas y caemos fácilmente en el error. La Biblia ha sido escrita por el pueblo de Dios y para el pueblo de Dios, bajo la inspiración del Espíritu Santo. Sólo en esta comunión con el pueblo de Dios podemos entrar realmente, con el ‘nosotros’, en el núcleo de la verdad que Dios mismo quiere comunicarnos” (VD 30).En síntesis, la revelación de Dios contenida en su Palabra ha sido transmitida de dos modos: la Tradición viva y la Sagrada Escritura que constituyen el depósito sagrado de la fe. El Magisterio vivo de la Iglesia ha recibido el oficio de interpretar auténticamente la Palabra de Dios, pues la Iglesia “se funda sobre la Palabra de Dios, nace y vive de ella” y también hoy la comunidad eclesial crece “en la escucha, la celebración y el estudio de la Palabra de Dios” (VD 3). Por tanto, “Acojamos el sublime tesoro de la Palabra revelada” (EG 175), pues “toda Escritura nos ha sido dada por Dios” (San Ireneo, AH II,28,3). Pbro. Francisco León Oquendo GóezDirector de los Departamentos de Catequesis y Animaciòn BíblicaConferencia Episcopal de Colombia

Mar 2 Sep 2025

Conferencia Episcopal de Colombia celebra el "Mes de la Biblia" con cuatro encuentros formativos sobre la comunión en las Escrituras

Este mes de septiembre, la Conferencia Episcopal de Colombia, a través de su Departamento de Catequesis y Animación Bíblica, celebrará el “Mes de la Biblia” con “Ecos de la Palabra”, una serie de encuentros formativos virtuales sobre las Sagradas Escrituras.Estos encuentros se transmitirán todos los miércoles del mes de septiembre a las 7:00pm a través de la página de Facebook y el canal de YouTube de la Conferencia Episcopal de Colombia. Están dirigidos a todos los animadores bíblicos y fieles interesados en aprender más sobre la Biblia.Temáticas a tratarLos encuentros contarán con el aporte de expertos en teología, quienes analizarán la forma en que la comunión, uno de los tres pilares de la Iglesia sinodal, atraviesa las escrituras de principio a fin.Estos “ecos” comienzan el 3 de septiembre con María José Schultz, licenciada en Teología Bíblica por la Universidad Pontificia de Salamanca y doctora en Teología por la Universidad de Deusto, quien liderará la temática “Una ley para vivir la comunión con Dios y los demás: El Pentateuco", donde se entrará en profundidad sobre los primeros cinco libros de la Biblia para ver cómo reafirman la comunión.La siguiente semana, el 10 de septiembre, el padre Pablo Andrés Palacios Montoya de la Arquidiócesis de Medellín, licenciado en ciencias bíblicas por el Pontificio Instituto Bíblico de Roma, facilitará la temática “Comunión en la solidaridad en Pablo. La colecta”. Se hablará sobre la caridad, la solidaridad y la fraternidad entre cristianos, y cómo esto refuerza la comunión.El 17 de septiembre, el padre Gustavo Enrique Zamora Guzmán de la Diócesis de Facatativá, Licenciado y especialista en Teología Bíblica y Doctor en Teología de la Pontifica Universidad Gregoriana de Roma, traerá la temática “Comunión en la diversidad: el Cuerpo de Cristo en acción" donde explicará la diversidad no como un obstáculo sino como una oportunidad para la comunión.Cerrando la iniciativa el 24 de septiembre, monseñor Jaime Alberto Cabrera Arcos, Obispo de Garzón, licenciado en Teología Bíblica de la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma. El prelado acompañará la temática “Comunión en el Apocalipsis“. Se referirá al último libro de la Biblia, dando una reflexión de cómo la comunión esta presente desde los primeros cinco libros hasta el último.En contexto¿Por qué se eligió septiembre como el “Mes de la Biblia”? Todo se remonta a San Jerónimo, doctor de la iglesia que se celebra el 30 de septiembre; fue el gran traductor de la Biblia del griego y del hebreo al latín, facilitando la divulgación de la Palabra de Dios, pues el latín en ese entonces era el lenguaje del pueblo. En su memoria, durante este mes la Iglesia busca promover actividades que fomenten la lectura diaria de sus pasajes, tal como lo hace la Conferencia Episcopal de Colombia los miércoles de este mes.También le puede interesar: Iglesia en Colombia lanza guía con reflexiones y talleres prácticos para vivir el Mes de la Biblia 2025

Mié 27 Ago 2025

Iglesia en Colombia lanza guía con reflexiones y talleres prácticos para vivir el Mes de la Biblia 2025

Como es tradición en la Iglesia Católica, el mes de septiembre se convierte en un tiempo especial para profundizar en el conocimiento, la meditación y la oración con las Sagradas Escrituras. Este año, la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), a través de su Departamento de Catequesis y Animación Bíblica, ha elaborado un subsidio especial o documento orientador para todos los fieles del país, titulado "Perseverantes en la Comunión (Hch 2,42)".El subsidio para 2025, presentado por monseñor Pedro Manuel Salamanca Mantilla, Presidente de la Comisión Episcopal de Catequesis y Animación Bíblica, se articula en torno al tema de la comunión, un aspecto fundamental y "la raíz más profunda de la sinodalidad". En la presentación del documento, el también Obispo de Facatativá destaca que esta temática "se inscribe en la línea del Sínodo sobre la Sinodalidad, convocado por el Papa Francisco, y está en profunda consonancia con el llamado del Papa León XIV a cuidar y fomentar la unidad, esa unidad que solo es posible en el Uno, es decir, en Jesucristo".El documento no es solo una guía teórica, sino un instrumento práctico que contiene cuatro talleres de Lectio Divina para ser desarrollados de manera personal y comunitaria. Cada taller profundiza en un pasaje bíblico específico que ilumina el concepto de comunión desde diferentes ángulos:1.Levítico 3: Reflexiona sobre "El sacrificio de comunión" en la antigua alianza.2.Salmo 133: Medita en "La comunión de los hermanos como Don de Dios".3.Hechos 2, 42-47: Presenta a la Iglesia como "Una comunión viva y vivificadora".4.1 Corintios 10, 14-22: Explora la relación intrínseca entre "Comunión y Eucaristía".El padre Francisco León Oquendo Góez, Director del Departamento de Catequesis y Animación Bíblica, augura que este material "llegue a muchos fieles y a las pequeñas comunidades que alimentan su fe, esperanza y caridad con la Palabra que es necesaria para que permanezcamos en Jesús y así produzcamos abundantes frutos".De esta forma, el subsidio invita a los fieles a no solo leer, sino a orar, meditar y contemplar la Palabra para que, finalmente, se traduzca en acción concreta (actio) que fortalezca la vida comunitaria.En contextoLa elección de septiembre como el Mes de la Biblia tiene su origen en la figura de San Jerónimo, doctor de la Iglesia, cuya festividad se celebra el 30 de septiembre. Él fue el gran traductor de la Biblia del griego y el hebreo al latín, obra conocida como "La Vulgata", y dedicó su vida al estudio y la divulgación de la Palabra de Dios. Durante este mes, las parroquias, familias y comunidades católicas en Colombia y el mundo entero promueven diversas actividades como cursos bíblicos, charlas, grupos de estudio y la instalación de altares domésticos con la Biblia abierta en un lugar visible, fomentando la lectura diaria de sus pasajes.

Vie 30 Ago 2024

Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí

VIGÉSIMO SEGUNDO DOMINGODEL TIEMPO ORDINARIOSeptiembre 1° de 2024Primera lectura: Dt 4,1-2.6-8Salmo: 15(14), 2-3a.3bc-4ab.5 (R. 1a)Segunda lectura: St 1,17-18.21b-22.27Evangelio: Mc 7,1-8.14-15. 21-23I.Orientaciones para la PredicaciónIntroducciónEl vigésimo segundo domingo del tiempo Ordinario está globalmente enmarcado por los mandamientos como tema general que atraviesa todas las lecturas; enunciamos tres ideas temáticas que orientan nuestra reflexión y oración: ●Los mandamientos como fuente de la normativa de un pueblo que ayuda, no solo a constituirse como un código de reglas, sino que ayuda al pueblo de Israel a constituirse como nación. De hecho, se puede observar que todos los países tienen una carta magna constitucional que les permite fijar las normas que los van a identificar y constituir como nación; en el caso de Israel, Dios dictamina la fuente de su reglamentación. ●Los mandamientos como fuente de honestidad del ser humano. En este sentido se puede observar cómo el contenido del Salmo 14 describe de qué manera se puede regir un hombre que quiere habitar en presencia de Dios padre; en pocas palabras se indican los parámetros para ser honesto y caminar de la mano de Dios y llegar a ser santo. ●Los mandamientos brotan de las normas esenciales del interior del hombre y no se quedan en el cumplimento de las meras apariencias. El evangelio muestra a Jesús indicando esta parte fundamental de los mandamientos, no es la norma por la norma que se pega a la letra de actitudes externas, sino que es la norma que transforma al hombre de adentro a hacia fuera. 1.Lectio: ¿Qué dice la Sagrada Escritura?El Salmo 15 (14) condensa el mensaje central de cómo un ser humano puede andar rectamente en la vida, a partir de configurar su vida con el mayor tesoro que puede tener su corazón en la vida: Dios. El poderse hospedar en la casa de Dios, constituye el camino y la meta del sueño del ser humano, y los mandamientos que llegan a regir este camino, como describe el salmista son: proceder honradamente, practicar la justica, tener intenciones leales, no calumniar con la lengua, no hacer mal al prójimo, ni difamarlo, honrar a los que temen al Señor, no prestar dinero a usura, ni aceptar soborno contra el inocente; y cierra el salmo diciendo: quien así obra nunca fallará. 2. Meditatio: ¿Qué me dice la Sagrada Escritura y qué me sugiere para decirle a la comunidad?El signo más importante que caracteriza la fe del pueblo de Israel, sin lugar a duda, es la convicción histórica de que su identidad nacional se funda en su relación con la Ley del Señor. Israel es la nación de la Alianza con Dios, esa es su identidad más real. En la primera lectura, el autor del libro del Deuteronomio nos ofrece el cuadro que determina el perfil característico del pueblo elegido: la vida del pueblo (su supervivencia) y su libertad (la posesión de la tierra) dependen del cumplimiento y del respeto de las normas (juqqim) y de los preceptos (mishpatim), que Dios ha establecido en su contenido y en su forma para siempre. La tradición rabínica posterior, ha visto en la expresión juqqim, los principios rituales de la Toráh; y en los mishpatim, los preceptos sociales, determinados por la práctica consuetudinaria de la Ley del Señor en la vida comunitaria. Así, la Ley que el Señor propone a su pueblo, posee una doble dirección: por un lado, de verticalidad, en cuanto se refiere a los asuntos de la relación ritual con Dios, en el reconocimiento de su santidad y soberanía; y, por otro lado, de horizontalidad, en la conciencia de que el hermano que pertenece al pueblo es objeto también del amor como criterio fundamental que encarna los principios más básicos de la Toráh (cf. Lv 19,17-19).Desde este punto de vista, Israel debe comprender que su tesoro nacional más valioso es la palabra de Dios, encarnada en la Toráh. Ella, no solo es la fuente de su actuar y el sello que enriquece su identidad, sino también el principio que acompaña y alimenta la sabiduría y la prudencia del hombre que le teme al Señor. Israel es faro para los pueblos, precisamente porque Dios habita con su Ley en medio de ella, determinando con esta cohabitación, que es un pueblo fuera de lo común: una nación que rige su vida por los criterios establecidos por su auténtico soberano, el Señor; un pueblo regido, incluso en sus actuaciones de vida más básicas, por la presencia del Rey que habita en medio de él, y que como Dios promulga y dirige su vida en medio de los demás pueblos. Es en este contexto religioso, en el que se puede comprender de una mejor manera los conceptos de pureza e impureza, que están tan arraigados en las convicciones religiosas y rituales del pueblo de Israel. Por pureza se debe entender la capacidad ritual de estar en la presencia de Dios. Un pueblo que tiene la convicción de cohabitar con Dios (cf. Ex 40, 34-38.), debe mantenerse constantemente en la disponibilidad interna y externa que le permita ser digno anfitrión del Morante Divino, que a través de su Ley le ha consagrado para siempre. Por este motivo, el pio israelita, debe preocuparse por mantener su cuerpo siempre preparado para mantenerse listo para el culto Divino del Señor en el Santuario (cf. Ez 44, 9ss).Las abluciones, el baño exterior de los vestidos, el lavado de los utensilios que sirven para los alimentos y otras prácticas, como las descritas con detalle por el evangelista Marcos a un auditorio quizá no tan familiarizado con el estilo de vida judío, adquirieron para la praxis cotidiana un valor tradicional que terminó por convertirse, con el paso del tiempo, en un compendio, a veces agobiante, de prescripciones y tradiciones rituales que acompañaban la cotidianidad del pueblo. Esta situación para Jesús, que se camuflaba bajo el ropaje de enseñanza tradicional, fue asesina de la memoria original, dando como resultado una relativización de los valores más importantes representados en los hábitos de pureza y dignidad, pasando de los niveles originales de la Toráh, al ámbito reduccionista de una exterioridad maquillada vaciada de significado.El evangelio pone de esta manera nuestra mirada en el modo de actuar de Jesús y de sus discípulos, y apuesta por enfocar también nuestra atención hacia el gran dilema de la pureza ritual. En el centro está la discusión de Jesús con los fariseos y los escribas venidos de Jerusalén, es decir, los representantes de la interpretación autoritativa de la Toráh, y en el contexto marcano el desencuentro rabínico entre estas dos partes se traslada de la acción externa de la crítica del “comer con las manos impuras”, como acusación a los discípulos, a una clara enseñanza de Jesús sobre el genuino sentido de lo que significa la relación entre la actuación de los discípulos con la práctica auténtica de la Ley. La citación de Isaías 29,13, da a los argumentos de Jesús un denotado énfasis profético, con el que el maestro se inscribe en la tradición bíblica que realza el valor del compromiso en el cumplimiento de la Ley, sobre la exterioridad ritual (cf. Os 6, 6-7; 1S 15, 22; Pr 21,3; Is 1,11; 58, 6; Am 5, 21). Esta línea de tradición profética da fe de que, en algún momento de la Historia de la interpretación de la Toráh, la diada juqqim-mishpatim, se separó por vías que afectaron también la comprensión de lo auténticamente religioso. Jesús así, argumenta que la dualidad vertical y horizontal de la Ley, que caracteriza la esencia de la Toráh, asumió el camino de la simple exterioridad ritual, del maquillaje que renuncia a la interioridad, que encuentra su mayor y mejor sede en el corazón (su corazón está lejos de mi). Jesús pone en evidencia un fenómeno paradójico: en la búsqueda azarosa por mantener la tradición, se olvida el contenido espiritual que la origina. Por la idolatría de las formas, se abandona la veneración a la Palabra de Dios, que, con elocuencia y vitalidad constantes, continúa, aún hoy, hablando al corazón de los seres humanos. ¡Tremenda tentación! Presente también en la Iglesia de nuestros tiempos.Jesús no separa con su predicación a los discípulos de la necesidad de alcanzar la pureza como estado que les habilita para estar en la presencia de Dios. Para Cristo, la pureza ritual permanece como algo aún relevante (cf. Lc 17,11-19). Sin embargo, el fiel debe cuidar su estado ritual de relación con Dios no de lo “que está fuera del hombre”, de lo que entra a su boca como alimento (haciendo especial referencia a la disciplina alimentaria judía, en un contexto quizá polémico para la comunidad marcana de su tiempo: cf. Hch10,11;15; Rm 14,14-23; 1Tm 4,3-4; Tt 1,15); sino de lo que afecta el Interior del ser humano, el corazón, verdadera sede que representa el espacio en el que se encuentra la genuina disposición humana para entrar en relación con el Señor, debiendo ser esta, la auténtica preocupación que debe caracterizar nuestra vida de piedad. El elenco marcano de las malas intenciones que salen del corazón, se remite necesariamente a los preceptos que tienen que ver con los mispatim judíos: fornicación, hurtos, homicidios, adulterios, ambiciones, envidias, calumnias, soberbia, terquedad, Para Jesús la práctica auténtica de la Ley debe reconciliar los elementos verticales y horizontales de la Toráh, juqqim y mishpatim, deben andar juntos, pero como ley inscrita y comprendida desde el corazón (cf. Jr 31, 33-34). De esta manera, la liturgia de hoy se convierte en un grito de características proféticas del Señor a su Iglesia. Es una invitación a dejarse constantemente irradiar por la luz del Espíritu, en el ánimo de redescubrir y renovar constantemente su propósito y disposición espiritual para mantenerse pura e Inmaculada ante su Señor (cf. Ef 5, 27). Así mismo, el llamado del Señor en este domingo es también un apelo personal para todos los creyentes en particular, que nos compromete a emprender un camino de “ecología interior”, de “cuidado del corazón”. La “pureza”, comprendida desde la Biblia, no es un tema irrelevante para nuestro compromiso cristiano, sino que, superados los prejuicios moralistas, sugiere un llamado constante a la renovación y a la conversión, tareas siempre necesarias en nuestro trasegar humano en la espera del cumplimiento escatológico personal y comunitario._______________________Recomendaciones prácticas:●Jornada Mundial de Oración por el cuidado de la Creación●Inicia el mes de la Biblia.●4-6 de septiembre. Simposio Teológico que precede al Congreso Eucarístico Internacional. Quito, Ecuador.II.Moniciones y Oración Universal o de los Fieles Monición introductoria de la Misa La liturgia de este domingo nos invita a realizar una mirada interior: contemplemos nuestro corazón como la sede de un auténtico y real encuentro con Dios y con los hermanos. En comunión con toda la Iglesia, revivamos el Misterio Pascual de nuestro Señor Jesucristo, con el ánimo de sentirnos instruidos por el Maestro y alimentados por su Eucaristía. Presentemos juntos la ofrenda que más agrada al Señor, la que purifica nuestras intenciones y la que nos permite comparecer puros ante su presencia. Que la Palabra de Cristo y su presencia amorosa, nos empujen a vivir con mayor ahínco y empeño nuestro compromiso cristiano. ¡Participemos con enorme alegría!Monición a la liturgia de la Palabra Hoy la Palabra de Dios nos habla con una fuerza profética inaudita. Con su Ley el Señor nos instruye y capacita para estar en su Presencia; con la fuerza de Cristo y de su Palabra nuestro corazón se purifica para presentarnos santos ante Dios; y con el compromiso cristiano, nuestra fe se convierte en acción viva en favor de los hermanos. ¡Escuchemos con mucha atención! Oración Universal o de los Fieles Presidente: Queridos hermanos, reunidos en comunión con toda la Iglesia, elevemos nuestras súplicas al Padre de los Cielos, principio y fin de toda Sabiduría, fuente de sanación para nuestros corazones, y confiados en que nos escuche, elevemos nuestra plegaria ante el altar de su presencia en las alturas. Digamos:R/. ¡Danos un nuevo corazón, Señor! 1.Por la santa Iglesia de Dios, peregrina en la tierra y sostenida por el ministerio de sus pastores, para que camine por el sendero de una constante renovación, y desde los principios de la Ley de Dios inscrita en nuestros corazones, sea luz que ilumine al mundo y testimonio creíble de la paz de Cristo. Oremos.2.Por quienes dirigen el destino de los pueblos, en especial, por los gobernantes cristianos, para que el sello de su fe permee las decisiones públicas, sostenga el progreso de los pueblos y guíen a sus ciudadanos por el sendero de la renovación constante en la solución compartida de todas las necesidades ciudadanas. Oremos.3.Por quienes sufren el flagelo de la pobreza extrema y del abandono estatal, para que el signo salvífico del corazón de Jesús suscite corazones convertidos, que sirvan de instrumentos de Cristo para socorrerlos en sus necesidades, y permitirles alcanzar la realización suficiente de sus aspiraciones humanas. Oremos.4.Por nuestras comunidades cristianas, para que en este mes de la Biblia tengan un encuentro concreto con la Palabra de Dios, de tal manera que penetre sus corazones y haciendo de cada uno de sus miembros testigos de la Verdad. Oremos.5.Por toda la creación, para que el Señor nos enseñe a contemplarlo en la belleza del universo, de tal manera que podamos ofrecer una acción de gracias por todo lo que ha creado y nos dé la gracia de sentirnos íntimamente unidos con todo lo que existe. Oremos.Oración conclusivaSeñor de todas las Luces,ilumina con tu amor nuestros corazones,cólmanos de tu Presencia,y recibe con benevolencia la oración detu Iglesia suplicante, para que,en el cumplimiento de tus preceptos,te glorifique e ilumine al mundohaciendo presente con su accióntu amor eterno que nos redime a todos.Tú, que vives y reinas, por los siglos de los Siglos.R/. Amén.

Jue 29 Ago 2024

Todo listo para celebrar el Mes de la Biblia 2024: conozca los recursos preparados por la Conferencia Episcopal de Colombia

La Iglesia Católica colombiana está lista para celebrar el Mes de la Biblia 2024 durante el próximo mes de septiembre. En esta oportunidad, en sintonía con el papa Francisco y en preparación para el Jubileo del 2025, tendrá como enfoque central la oración; de allí el lema elegido para motivar la celebración: “Alegres en la esperanza, perseverantes en la oración”.En este contexto, desde la Comisión Episcopal y el Departamento de Catequesis y Animación Bíblica de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) se ha preparado una cartilla orientadora con textos y talleres prácticos que permitirán a todos los fieles profundizar en el conocimiento y en la lectura orante de la Palabra de Dios. Además, cada miércoles de septiembre, desarrollarán encuentros formativos sobre la Biblia; actividades que serán transmitidas a través del canal de YouTube y la página de Facebook de la CEC.En la presentación del documento, monseñor Pedro Manuel Salamanca Mantilla, presidente de esta comisión episcopal, ha resaltado la importancia de aprovechar este itinerario reflexivo y formativo “en medio de estos tiempos difíciles y desafiantes, pero no por ello carentes de la presencia fiel de Dios y de su acción misericordiosa”. Además, se ha referido a la conexión existente entre la Sagrada Escritura, la oración y la esperanza:“En la lectura meditada y orante de la Palabra no solo contemplamos esperanzados las obras de Dios y descubrimos su amor, sino que le suplicamos al Señor que, con su misericordia, venga a cada instante y nos salve. La plegaria adelanta la venida del Reino: “Pidan y se les dará” (Mt 7,7) nos ha dicho el Señor. Desde el inicio la Iglesia ha clamado en su oración: ¡Ven, Señor Jesús! (1 Cor 16,22) (…) Al avivar la esperanza, la oración nos anima también en el compromiso por la transformación del mundo en el que vivimos. La oración nos conforta, pues en ella recibimos siempre como en anticipo lo que anhelamos, la oración nos alienta porque en ella re- suena siempre el gozoso mensaje de la Pascua: la última palabra sobre la historia no será la victoria de las fuerzas del mal, si no el triunfo de la vida y del amor. Por ello los discípulos misioneros de Jesús trabajamos sin desanimarnos. La batalla decisiva ha sido ya ganada por Cristo. Nada nos fortalece tanto como esta certeza. Además, en la oración encontramos las luces necesarias para colaborar con Dios en la obra que Él realiza en cada momento de la historia (…) Cuánto bien nos hace orar en estos tiempos convulsionados y de incertidumbre por los que estamos pasando a nivel mundial y nacional”.Por su parte, el padre Francisco León Oquendo Góez, director del departamento, explica la relación entre la Lectio divina y la oración, e introduce a los lectores en lo que será la metodología de la cartilla:“La revelación se convierte en acción, gracias a una relación. La relación con el Dios que se revela suele vivirse mediante la oración. Por ello, se propone dedicar los encuentros del mes de la Biblia, a profundizar en la oración, mediante la lectura orante de algunos pasajes bíblicos que presentan modelos y fomentan el arte de la oración (…) La metodología es la lectio divina, la manera de acercarse a la Escritura que ha alimentado la espiritualidad, fomentado la oración, edificado la comunidad, impulsado la misión, iluminado la sinodalidad y favorecido la santidad durante muchos siglos, hasta el día de hoy. Tanto la lectio divina como la oración se hacen bajo el impulso del Espíritu Santo. “La Escritura se ha de leer e interpretar con el mismo Espíritu con que fue escrita” (DV 12) y es el Espíritu quien en la oración “viene en ayuda de nuestra debilidad, porque no sabemos pedir como conviene” (Rom 6,26) (…) El vínculo entre lectio divina y oración fue subrayado sabiamente por Benedicto XVI: “En este marco, quisiera recordar y recomendar sobre todo la antigua tradición de la Lectio divina: la lectura asidua de la sagrada Escritura acompañada por la oración realiza el coloquio íntimo en el que, leyendo, se escucha a Dios que habla y, orando, se le responde con confiada apertura del corazón". (Discurso al Congreso Internacional en el XL aniversario de la Constitución Conciliar "Dei Verbum", 2005).Estructura de la cartilla orientadoraEn la cartilla, se proponen diez encuentros, cada uno con siete pasos (un contexto o indicaciones previas, inicio, lectura, meditación, oración, confrontación y contemplación). Están distribuidos así:Primer encuentro: Moisés y su última oraciónSegundo encuentro: Ana, entre el lamento y la alabanzaTercer encuentro: Elías y la oración en la soledadCuarto encuentro: Elías y la oración en el desierto y la montañaQuinto encuentro: Un poeta ora en medio de la guerraSexto encuentro: María e Isabel y la oración de la pequeñezSéptimo encuentro: La oración de los hijos y los hermanosOctavo encuentro: La oración sacerdotalNoveno encuentro: Jesús ora en la cruzDécimo encuentro: La oración como canto de las realidades últimasEncuentros formativos virtuales sobre BibliaCada miércoles del mes de septiembre, a las 7:00 p.m. el Departamento de Catequesis y Animación Bíblica realizará, de manera virtual, encuentros formativos en los que se abordarán diversos temas asociados a la Sagrada Escritura. Entre ellos: “La Oración en la Sagrada Escritura: El orar del no nato, de Isabel y de María”, tema que será orientado por el padre Wilson Moreno de la Diócesis de Vélez; también, algunos rasgos de la oración desde el Libro del Apocalipsis, tema que abordará el padre Juan Bautista Alzate Arias, licenciado en teología bíblica de la Pontificia Universidad Gregoriana y doctor en teología bíblica de la Universidad PontificiadeSalamanca.Estas charlas serán transmitidas a través del canal de YouTube y la página de Facebook de la Conferencia Episcopal de Colombia.En contextoEl Mes de la Biblia se celebra en la Iglesia Universal debido a que el 30 de septiembre es la fiesta de San Jerónimo, uno de los Padres de la Iglesia latina, reconocido, especialmente, por dedicar su vida al estudio de la Sagrada Escritura. Tanto así, que la tradujo al latín. A esa traducción se le conoce como “Vulgata” (“Vulgata Editio”, es decir, “edición para el pueblo” o traducción difundida entre los pueblos), ha sido considerada por la Iglesia Católica como la versión oficial de la Biblia.

Vie 1 Sep 2023

Iglesia colombiana presenta una guía para vivir el Mes de la Biblia 2023

La Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), a través del Departamento de Catequesis y Animación Bíblica, pone disposición de todos los fieles en el país un itinerario, inspirado en la fraternidad y sinodalidad, para que sea implementado durante septiembre, considerado el Mes de la Biblia a nivel universal.Además de dar a conocer algunos aspectos clave de esta celebración y brindar orientaciones de tipo metodológico, que parten de la Lectio Divina, esta guía contempla 12 encuentros o momentos que pueden ser vividos en asamblea familiar, comunidad de base u otro tipo de pequeña comunidad.Son tres las dimensiones en las que está estructurado el itinerario: 1. Aprendiendo a ser pueblo de Dios en la comunión. I Parte - Antiguo Testamento. 2. Aprendiendo a participar en una Iglesia discipular. II Parte -Nuevo Testamento. 3. Aprendiendo a vivir la sinodalidad misionera.A propósito del Sínodo sobre la Sinodalidad, llamado del papa Francisco que inspira este momento de la Iglesia, que ha implicado un importante proceso de escucha, monseñor Pedro Manuel Salamanca Mantilla, obispo de la Diócesis de Facatativá y presidente Comisión Episcopal de Catequesis y Animación Bíblica de la CEC, afirmó: “si se trata de escucha, es necesario primero inclinar el oído ante Dios quien nos dirige continuamente su Palabra y por medio de ella nos ayuda a descubrir su voluntad”.“La Palabra tiene las claves fundamentales para comprender el designio sinodal del Señor sobre la Iglesia y esta Palabra, escuchada y orada, nos permitirá asimismo identificar juntos todas las llamadas que el Señor no está haciendo en este momento de la historia, para responder a la misión evangelizadora que nos ha confiado”, agrega el obispo en la presentación de la guía.En el documento también se indica la importancia de dar inicio al mes bíblico con una Liturgia de la Palabra, que “motive a que cada fiel participe con su propia Biblia, haga una bendición especial de ellas. Y concluya el mes con una celebración eucarística festejando el día de San Jerónimo”, plantean allí.Monseñor Pedro Salamanca exhorta a todos los párrocos y animadores de evangelización del país para que hagan uso de este subsidio, “que le permitirá al Pueblo de Dios vincularse todavía más al proceso sinodal desde su mismo corazón: la escucha de la Palabra del Señor”.Transmisiones en vivo durante el Mes de la BibliaEn el contexto del mes bíblico, cada miércoles de septiembre, a las 7:00 p.m., el Departamento de Catequesis y Animación Bíblica, bajo la dirección del padre Francisco Mejía, realizará una transmisión en vivo con un invitado especial.El calendario de estos espacios de reflexión y formación digital, que serán transmitidos a través de la página de Facebook y el canal de YouTube de la Conferencia Episcopal, está previsto así:Miércoles 6 de septiembre / La escucha / Juan 15,12-17Invitado: P. Guillermo Acero Alvarín, cmj, profesor Facultad de EstudiosBíblicos, Pastorales y de Espiritualidad. Universidad Minuto de Dios.Miércoles 13 de septiembre / La ministerialidad / Lucas 22,23-27Invitado: P. Efrén Zuluaga Buitrago, profesor de Sagrada Escritura Seminario Mayor Nuestra Señoradel Rosario Arquidiócesis de Manizales Diócesis de la Dorada – Guaduas.Miércoles 20 de septiembre / La misericordia / Santiago 2,13-18Invitado: Jhon Fredy Mayor Tamayo, profesor del Instituto Bíblico Pastoral Latinoamericano. Universidad Minuto de Dios.Miércoles 27 de septiembre / La propuesta evangelizadora / Hechos 20,16-36Invitada: Hna. Patricia Osorno, ccv, profesora de Sagrada Escritura Universitaria Agustiniana.Sobre el Mes de la BibliaLa celebración del Mes de la Biblia, cada año, durante septiembre, se da en el contexto de la celebración del día deSan Jerónimo, que se lleva a cabo el día 30. Según la historia, este santo fue un hombre que consagró toda su vida al estudio de las Sagradas Escrituras, y además, quien realizó la traducción de la Biblia al Latín, por encargo del papa Dámaso I.

Lun 5 Sep 2022

Episcopado ofrece ciclo de conferencias en el mes de la Biblia

El Departamento de Catequesis y Animación Bíblica, de la Conferencia Episcopal de Colombia, ha dispuesto para cada miércoles del mes de septiembre ofrecer un ciclo de conferencias gratuitas por el mes de la Biblia, con diversas temáticas impartidas por destacados especialistas. El ciclo de conferencias comenzará el próximo miércoles 07 de septiembre a las 7:00 p.m. hora de Colombia y le seguirán los miércoles 14, 21 y 28 del mismo mes. Entre las conferencias que se ofrecerán están: * Iniciación del camino de fraternidad y sinodalidad, padre Guillermo Acero Alvarín, profesor de la Facultad de Estudios Bíblicos Pastorales y de Espiritualidad de la Universidad Minuto de Dios. (7 de septiembre). * La Justicia, padre Jhon Edison Márquez Torres, profesor Sagrada Escritura, Seminario Mayor Nuestra Señora del Rosario, de la Arquidiócesis de Manizales. (14 de septiembre). * La Celebración. P. Jaime Alberto Pérez Villegas, profesor Sagrada Escritura, Delegado de Comunicaciones de la Arquidiócesis de Manizales. (21 de septiembre). * La Esperanza, Monseñor José Mario Bacci Trespalacios, obispo de la Diócesis de Santa Marta. (28 de septiembre). Las mismas serán transmitidas a través de las redes sociales de la Conferencia Episcopal de Colombia @Episcopadocol

Vie 2 Sep 2022

MES DE LA BIBLIA: La CEC ofrece el itinerario “Caminando juntos como Pueblo de Dios”

La Iglesia celebra en septiembre el Mes de la Biblia, con el objetivo de promover el encuentro con Dios por medio de la lectura y el entendimiento de las Sagradas Escrituras, el Departamento de Catequesis y Animación Bíblica, de la Conferencia Episcopal de Colombia, ha publicado el itinerario titulado: “Caminando juntos como Pueblo de Dios”. Este material, está inspirado en la invitación hecha por el Papa Francisco de caminar juntos en la sinodalidad. Por lo que sus textos están iluminados por fuentes bíblicas que propone el Sínodo. Consta de dos etapas: Mes de la Biblia 2022: Aprendiendo a ser pueblo de Dios en la comunión - Antiguo Testamento - . Y para el mes de la Biblia de 2023: Aprendiendo a participar en una iglesia discipular - Nuevo Testamento. A lo largo del itinerario, se proponen seis encuentros que pueden ser trabajados en asambleas familiares, comunidad de base o en otro tipo de pequeña comunidad, siempre invitando a un compartir fraterno y a lanzarse a la tarea de caminar juntos. Esta cartilla, que fue preparada por el padre Guillermo de Jesús Acero Alvarín cmj, no sólo es un subsidio para el mes bíblico, es una herramienta que puede ser integrada a diversas acciones pastorales de cada lugar. Además, la Conferencia Episcopal ofrecerá los miércoles 7, 14, 21 y 28 de septiembre a las 7:00 p.m. unas charlas propias para animar este mes, las mismas serán transmitidas a través de su cuenta de Facebook DESCARGA EL ITINERARIO AQUÍ