Vie 19 Jul 2019
Reconciliar el ámbito jurídico y pastoral: desafío en el proceso de nulidad matrimonial
Esta fue una de las conclusiones y proyección para el trabajo en los Tribunales Eclesiásticos del país, tras cinco días de estudio y reflexión en torno a la implementación del Motu Proprio ‘Mitis Iudex Dominus Iesus’ (MIDI), sobre la reforma del proceso canónico para las causas de declaración de nulidad del matrimonio en el código de derecho canónico.
“El interés fundamental es el de servir a los fieles, a los miembros de nuestra Iglesia, a aquellas personas que se encuentran en esas dificultades matrimoniales y quieren arreglar su situación con Dios, con la Iglesia, con el mundo y con la sociedad”, explicó monseñor Héctor Cubillos Peña, obispo de la Diócesis de Zipaquirá.
En este sentido, agregó, “la acción y el servicio de los Tribunales es ayudar para que las parejas puedan encontrar el camino de sus propias vidas, en ningún momento son una oposición, al sacramento del matrimonio, a la vocación al amor y a la vida familiar”.
Durante la jornada, orientada por expertos nacionales e internacionales, se abordaron, entre diversas temáticas: las características del proceso ordinario y del nuevo proceso de anulación de matrimonio; las novedades del MIDI; el rol del obispo y del párroco en la justicia diocesana en referencia a este proceso; elementos eclesiológicos; la inmadurez afectiva y los procesos de apelación en Colombia.
Como principales desafíos para la implementación efectiva de la reforma, el padre Marcelo Gidi, catedrático de la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma, identificó tres aspectos:
“En primera instancia, es fundamental que existan operadores de justicia en la Iglesia preparados y formados. No solo se requiere el voluntariado, sino el ejercicio de competencia, el ejercicio deontológico, porque tiene que hacerse cargo de una situación tan sagrada como es un matrimonio y, sobre todo, una situación tan sagrada como es una situación de una familia que se ha visto rota por un fracaso.
El segundo desafío es garantizar que la administración en la Iglesia sea pensada por la verdad, por la caridad y por la justicia. No solamente para aquellos que tengan interés, ni para aquellos que tienen recurso (…) Esta reforma dice que ojalá en todas las parroquias existan personas u oficinas para acoger e informar cuál es su situación eclesial para ayudarla y acompañarla en el procedimiento de nulidad, si es que esa historia tiene un fundamento para el procedimiento eclesiástico de nulidad.
Finalmente, el padre Marcelo, dijo que “lo importante es que creamos en el matrimonio, en la familia, este es otro elemento importante para ejecutar esta ley de declaración de nulidad, por eso la justicia tiene que defender también el verdadero matrimonio y la familia”.
Este V Encuentro Nacional de Derecho Canónico organizado por Tribunal Eclesiástico de Apelación para Colombia, contó con la participaron de obispo, sacerdotes, religiosos y laicos, vinculados a los cerca de 53 Tribunales Eclesiásticos existentes en el país.