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Secretariado Permanente del Episcopado Colombiano

Mar 16 Jul 2024

Con Eucaristía institucional, el Secretariado Permanente del Episcopado Colombiano inicia labores con la nueva Comunidad de Presidencia

En medio de un ambiente de fraternidad, este martes, 16 de julio, en la sede de la Conferencia Episcopal de Colombia, se celebró una Eucaristía institucional para agradecer a la saliente Comunidad de Presidencia y darle la bienvenida a la nueva Comunidad de Presidencia que fue elegida durante la reciente Asamblea Plenaria. En la celebración, presidida por el cardenal Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá y presidente de la institución durante el trienio 2021-2024, participaron los directores y colaboradores del Secretariado Permanente del Episcopado Colombiano (SPEC).La Santa Misa fue concelebrada por monseñor Omar Alberto Sánchez Cubillos, arzobispo de Popayán y vicepresidente de la CEC para el trienio 2021-2024. También, por quienes ya asumieron como nuevos directivos del periodo 2024-2027: monseñor Francisco Javier Múnera Correa (arzobispo de Cartagena y presidente), monseñor Gabriel Ángel Villa Vahos (arzobispo de Tunja y vicepresidente) y monseñor Germán Medina Acosta (obispo electo de Engativá y secretario general).Durante la homilía, el cardenal Rueda manifestó su gratitud por el respaldo recibido durante estos tres años de parte de cada uno de los servidores del SPEC; también, por el trabajo que realizan en favor de la Iglesia. Aseguró que, pese al relevo directivo en la institución, la misión continúa: “Nos quedamos todos sirviéndole al Señor, como Pueblo de Dios, en cada una de nuestras tareas”.El purpurado también valoró el tiempo que estuvo ejerciendo como presidente de la CEC como una oportunidad única para conocer aún más la realidad de la Iglesia y del país.“Ha sido un tiempo muy bello de conocer más la Iglesia, su belleza, pero también sus tristezas, heridas, preocupaciones y desafíos. Y cuando uno conoce más a fondo la Iglesia, la ama más”, expresó el cardenal Rueda.De cara a lo que vendrá en el nuevo trienio para la Iglesia colombiana, el Arzobispo de Bogotá invitó a todos a ser “profetas de la esperanza” en cada uno de los ambientes laborales y personales en los que están; a mantener la vigilancia y calma frente a los desafíos; y a permanecer en la fe para estar afianzados en Dios.Monseñor Omar Alberto Sánchez, también se sumó a las palabras de gratitud del Cardenal e hizo una invitación a la valoración. Pidió a los colaboradores sentirse orgullosos por el trabajo que realizan en favor de la Iglesia y del país, especialmente en medio de las “aguas difíciles” que se tienen. Afirmó que, como obispos, son conscientes que delante ellos hay miles de sacerdotes, vocaciones, carismas de vida religiosa y laicos, responsables de que la Iglesia pueda llegar a los diferentes niveles de la realidad.El prelado animó a reconocer el trabajo que realiza cada uno, como una verdadera vocación, que si se suma con las demás, ayuda a que se logren muchas cosas: “No vale la pena estar aquí sin creer que esta es la vocación y el servicio que están prestando a la Iglesia (…) Cuando hay voluntad se pueden hacer cosas increíbles”, manifestó. “Ustedes son una gran palanca e impulso que mueve muchas cosas en la Iglesia colombiana, desde los diferentes niveles de responsabilidad ayudan a que algo más grande se mueva y alcance al país; hacen que la misión de la Iglesia tenga un efecto real en la vida de Colombia, en espacios de dolor, escenarios de guerra y también en momentos muy especiales de este país”, agregó monseñor Sánchez.Por su parte, el nuevo presidente del episcopado, monseñor Francisco Múnera, puso las intenciones de gratitud y acción de gracias bajo la advocación de la Virgen María. Agradeció también al Señor por el tejido de relaciones, apoyos y trabajo en equipo con el que cuenta la Iglesia colombiana, que se va realizando “por la obra de la Salvación”.El arzobispo de Cartagena recordó que la misión que desarrolla cada uno es al servicio de Dios, y que todos están llamados a aportar, asumiendo una actitud de donación y entrega para “poder ir más allá”.Pidió a servidores encomendar a la Virgen las labores de este nuevo trienio: “Es María quien nos conduce hacia Jesús, hacia las tareas, hacia el Monte Santo (…) Cada uno de nosotros está llamado a conducir todos nuestros entornos al encuentro con el Señor”, manifestó.Monseñor Múnera agradeció al cardenal Luis José Rueda y a monseñor Omar Sánchez por el trabajo desarrollado en la dirección de la Conferencia Episcopal. También, a monseñor Luis Manuel Alí, quien, por designación del papa Francisco, asumió como secretario de la Comisión Pontificia para la Protección de Menores desde el pasado mes de mayo:“De la anterior Comunidad de Presidencia recibimos una antorcha luminosa, ahora nos la entregan para seguir acompañando la realidad de la Iglesia en todos los rincones de la patria, para seguir aportándole desde los valores del Evangelio”, agregó el prelado.Durante la celebración, el cardenal Rueda y monseñor Francisco también agradecieron a los sacerdotes que terminaron su servicio como directores en las diferentes áreas del SPEC: el padre Jorge Bustamante, el padre Francisco Mejía, el padre Omer Giraldo, el padre Eliecer Soto, el padre Manuel Vega y el padre Alberto Forero.Ver esta publicación en InstagramUna publicación compartida por Conf. Episcopal de Colombia (@episcopadocol)

Mié 8 Mar 2023

Mujeres en el Secretariado del Episcopado: Protagonistas en el caminar hacia una sociedad más humana

"Por aquellos días, María se levantó y marchó deprisa a la montaña, a una ciudad de Judá; y entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. Y cuando oyó Isabel el saludo de María, el niño saltó en su seno, e Isabel quedó llena del Espíritu Santo; y exclamando en voz alta, dijo: “Bendita tú entre las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre. ¿De dónde a mí tanto bien, que venga la madre de mi Señor a visitarme? Pues en cuanto llegó tu saludo a mis oídos, el niño saltó de gozo en mi seno; y bienaventurada tú, que has creído, porque se cumplirán las cosas que se te han dicho de parte del Señor”. (Lc 1, 39-45) En el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, en la mañana de este miércoles 8 de marzo, al interior del Secretariado Permanente del Episcopado Colombiano (SPEC) en la ciudad de Bogotá se llevó a cabo un espacio de encuentro comunitario para reconocer, reivindicar, agradecer y exaltar la labor de las mujeres que colaboran desde sus saberes, testimonios, experiencias y trabajo para hacer posible la misión de la Iglesia Católica. A nivel institucional, el espíritu de servicio y comunión de las mujeres que son y han hecho parte de los distintos procesos de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), el Secretariado Nacional de Pastoral Social - Cáritas Colombiana (SNPS-CC) y la Comisión de Conciliación Nacional (CCN) ha sido indispensable para abrir caminos hacia realidades más justas, fraternas, solidarias, reconciliadas y en paz. Después de realizar la lectura colectiva del pasaje del Evangelio según San Lucas en el que María e Isabel se encuentran y celebran la cultura del encuentro y el servicio (Lc 1, 39-45), el padre Rafael Castillo Torres, director del SNPS-CC, compartió algunas reflexiones suscitadas por este pasaje respecto a la importancia y el papel fundamental de las mujeres para hacer de este una iglesia viva y en movimiento. “Cada una de ustedes, allí donde Dios las ha colocado, ha sabido ser una colaboradora, de primera línea, en los distintos campos de nuestra acción evangelizadora. El haberlas escuchado y abrirnos a la ministerialidad con ustedes, es un signo de cómo Dios suscita en nuestra Iglesia mujeres creyentes, llenas de espíritu profético que nos contagian de alegría y la hacen ver su rostro más humano”, señaló el presbítero. Dichas palabras encuentran eco y se abrazan con la reflexión realizada en esta jornada por el Papa Francisco, con motivo de esta fecha conmemorativa, quien señaló: "En el Día Internacional de la Mujer pienso en todas las mujeres, les agradezco por su esfuerzo para construir una sociedad más humana a través de su capacidad de captar la realidad con mirada creativa y corazón tierno". De este modo la Iglesia reitera también su compromiso con el trabajo paciente, constante, colectivo y esperanzado por continuar caminando en sinodalidad hacia horizontes con igualdad de oportunidades para hombres y mujeres. Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida por Conf. Episcopal de Colombia (@episcopadocol)