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diócesis de santa marta

Jue 2 Mayo 2024

Obediencia sacerdotal

Por P. José Antonio Díaz - El día de la ordenación sacerdotal se promete al obispo obediencia. Se trata de una comunión jerárquica querida por Jesús, Sumo y Eterno Sacerdote, en la relación del presbítero con el propio Obispo. De este modo se hace partícipe ontológicamente del sacerdocio y del ministerio de Cristo.Del Obispo, en efecto, se recibe la potestad sacramental y la autorización jerárquica para tal ministerio. La Exhortación Apostólica Post-sinodal Pastores Dabo Vobis, afirma: «En verdad no se da ministerio sacerdotal sino en la comunión con el Sumo Pontífice y con el Colegio episcopal, particularmente con el proprio Obispo, hacia los cuales debe observarse obediencia y respeto» (PDV 28).Es por esta unión en la comunión sacramental que el presbítero es ayuda e instrumento del orden episcopal. En su ministerio prolonga la acción del Obispo, del cual se hace presente su figura de Padre y Pastor. Un presbítero no puede actuar sin comunión con su Obispo.A propósito de esto, el Concilio sugiere una vía: «las relaciones entre los Obispos y los Sacerdotes deben fundarse principalmente en los vínculos de la caridad sobrenatural» (ChD 28), caridad que mira a evidenciar una relación que supera la relación funcional radicándose en la realidad de la familia presbiteral de la que el Obispo es el Padre y el Pastor. Es esta caridad sobrenatural la que favorece y consolida la colaboración con el Obispo, haciendo más fructuosa la común acción pastoral al servicio de las almas (cf. El Sacerdote y el Obispo. «¿Prometes a mi y a mis sucesores reverencia y obediencia? ¡Prometo!»: Del Rito de la Ordenación).Obediencia por amor a la IglesiaEl amor a la Iglesia, como misterio de comunión para la misión, se aprende del amor del mismo Cristo, que "amó a la Iglesia y se entregó en sacrificio por ella" (Ef 5,25). Citando a San Juan Pablo II, cuando afirmaba que "la Eucaristía es absolutamente el centro de mi vida y de cada jornada" (Discurso del 27 de octubre de 1995, a los treinta años del Decreto Presbyterorum Ordinis), el Papa Benedicto XVI comenta: "Del mismo modo, la obediencia a Cristo, que corrige la desobediencia de Adán, se concretiza en la obediencia eclesial, que para el sacerdote es, en la práctica cotidiana, en primer lugar, su propio Obispo" (Benedicto XVI, Discurso 13 mayo).La comunidad primitiva era "un solo corazón y una sola alma" (Hch 4,32), porque, al celebrar la "fracción del pan" (la Eucaristía), sabían "escuchar" con fidelidad y con actitud de oración la predicación apostólica: "Perseveraban en la enseñanza de los apóstoles, en la comunión, en la fracción del pan y en las oraciones” (Hch 2,42). Esta comunión expresa la unión interna de corazones que se debe manifestar en la unidad, y nace del amor a Cristo y a su Iglesia. Ese amor que sólo se puede aprender en intimidad con el mismo Cristo, presente en la Eucaristía y escondido en la palabra predicada por los Apóstoles. Es, pues, "comunión" y escucha-obediencia amada y vivida afectiva y efectivamente.La pregunta de Jesús a Pedro: “¿Me amas?” (cf. Jn 21,15-19) para comunicarle el "Primado" en pastoreo, nos debe interpelar a nosotros mismos, como pastores del mismo rebaño. La respuesta de Pedro, "tú sabes que te amo", es también la nuestra. De esta manera, es que vivimos en comunión con quien "preside la caridad" universal, es decir con Pedro y sus sucesores. Nuestra "obediencia", vivida con amor, es parte esencial de nuestra espiritualidad sacerdotal. La comunión con el propio Obispo forma parte de esta misma vivencia eucarística y sacerdotal, para construir la "fraternidad sacramental" en el Presbiterio (Presbyterorum Ordinis, n. 8).La celebración eucarística nos une a Cristo, dejándonos transformar por él, también en su obediencia a los designios del Padre. Por esto, nuestra obediencia "personifica a Cristo obediente" (Benedicto XVI, Discurso 13 mayo) (cf. Tema para la Jornada Mundial de Oración por la Santificación de los Sacerdotes: 3 junio 2005)Presbíteros, colaboradores del obispoLos presbíteros son los más cercanos colaboradores del Obispo, los próvidos colaboradores, dice el Concilio, digamos que son los más prójimos, los hijos mayores, los hermanos más cercanos. Por esta razón, debe existir el deseo de conformar una familia presbiteral, cuya cabeza y paternidad radican en el Obispo, en quien detenta el carisma episcopal.No se puede olvidar, que la comunión de los sacerdotes con el Obispo redunda en bien de la gente, de los fieles. De unas buenas relaciones los mayores beneficiarios son los fieles, las comunidades. En cualquier circunstancia, pensemos en el bien de la gente. Si uno de nosotros decide romper con esta comunión, rompe con Cristo y con la Iglesia.P. José Antonio DíazSacerdote de la Diócesis de Santa Marta

Jue 25 Ene 2024

Monseñor, ¡Feliz aniversario episcopal!

Por P. José Antonio Díaz - Monseñor José Mario: Al cumplirse hoy los dos años de su ordenación episcopal y posesión canónica, los sacerdotes le felicitamos en una profunda actitud de agradecimiento a Nuestro Señor Jesucristo, Buen Pastor, por el don de su persona y ministerio.Conocemos aquella frase del Sermón 340, 1 de San Agustín: “Para ustedes soy obispo, con ustedes soy cristiano”. A propósito, le decimos a Usted, Monseñor, que ha encarnado claramente la exigencia de ser modelo de obispo y pastor entregado al servicio del ministerio con claridad y decisión, teniendo presente el de Cristo, que se hace servidor de muchos, compañía cercana en el camino.Sienta el aprecio y el cariño de toda la Diócesis de Santa Marta, de tantos hombres y mujeres de buena voluntad que le estiman, entre ellos sus sacerdotes, con los que debe existir un vínculo especial. Recordemos que la unidad del presbítero con el Obispo tiene su raíz ontológica y salvífica en el don compartido del sacramento del Orden, que tiene en el episcopado su plenitud. Este sacramento funda una relación que entraña tanto igualdad, es decir, fraternidad, como obediencia al Obispo, pues es nuestro padre.Unidos en oración, en la diócesis, agradecemos a Dios por su ministerio. Pedimos al Señor Jesús que lo continúe guiando, acompañando y fortaleciendo en la misión que le ha sido encomendada, bajo el amparo de nuestra Madre, María Santísima.P. José Antonio DíazSacerdote de la Diócesis de Santa Marta

Jue 4 Mayo 2023

Mayo, mes dedicado a la Virgen María

Por Pbro. José Antonio Díaz Hernández - Iniciamos el mes de mayo, mes que dedicamos de manera especial a fijar nuestros ojos en María, a cultivar y purificar nuestra devoción mariana, porque para nosotros, discípulos misioneros de Jesús, ella es modelo perfecto de vida cristiana y en ella encontramos estímulo, refugio y fortaleza para anunciar a Jesús, salvador del mundo. Podríamos aprovechar, entonces, estos días, para profundizar en el conocimiento y la búsqueda, de una verdadera relación con María, que no quede reducida solo a algunos actos de piedad. Al respecto nos puede ayudar de manera particular la Sagrada Escritura, la teología de los Santos Padres, bajo la dirección del Magisterio. En cuanto a María en el Nuevo Testamento, sólo unos pocos pasajes nos hablan de ella. Sin embargo, a partir de estos textos podemos escuchar su testimonio del modo más atento y preciso sobre la vida de aquella Mujer que se convirtió en una figura singular en la historia de la salvación. Puede parecer asombroso ver cuántas cosas nos dicen estos pasajes sobre la llamada de María por parte de Dios, sobre su camino con Jesús, sobre su relación con él en su niñez y durante su vida pública, sobre su relación con los discípulos de Jesús. De toda esta riqueza sobre la madre de Jesús, me permito compartir con ustedes, los dos grandes amores que estuvieron presentes en la vida de María: el amor a Dios y el amor a los hermanos. 1. El amor a Dios: Tras la explicación del ángel sobre el cómo de la generación del “Hijo del Altísimo” en su seno, María responde confiadamente, “He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu Palabra” (1,38). El Papa Benedicto XVI, en su libro La infancia de Jesús, explica esta respuesta generosa de María, citando una homilía de Adviento de San Bernardo de Claraval. Después de la caída de nuestros primeros padres, todos quedamos sometidos bajo el dominio de la muerte. Sin embargo, Dios busca una nueva entrada en el mundo. Llama a la puerta de María. Con esto, se quiere indicar que Dios necesita la libertad humana, pues no puede redimir al hombre, creado libre, sin un “sí” libre de su voluntad. Por eso la respuesta de María es esperada con expectación por el cielo y la tierra. San Bernardo muestra como el “hágase en mí según tu palabra” es el momento de la obediencia libre, humilde y magnánima a la vez, en la que se toma la decisión más alta de la libertad humana. Estas enseñanzas prueban con claridad que María se convierte en madre por su “sí” generoso. A este respecto, también los padres de la Iglesia han dicho esto mismo cuando afirman que “María habría concebido por el oído”, esto es, mediante su escucha. Por su obediencia libre la Palabra ha penetrado su vida, y ella se ha hecho fecunda (Cf. J. RATZINGER [BENEDICTO XVI], La infancia de Jesús, pp. 42-43). Esta actitud de escucha generosa y libre por parte de María, está motivada por su amor a Dios. Por amor a Dios escuchó, llena de disponibilidad, las palabras del ángel que le anunciaba que iba a ser Madre. No le discute ni le pone condiciones. Ama a Dios con todas sus fuerzas, con toda su alma, con todo su ser (cf. Dt 6,5); amó a su Hijo Jesucristo, y por eso lo acompañó con sufrimiento hasta el calvario y, de pie, escuchó sus últimas palabras y, en su descendimiento, lo recibió entre sus brazos. El Concilio Vaticano II subraya la dimensión profunda de la presencia de la Virgen en el Calvario, recordando que “mantuvo fielmente la unión con su Hijo hasta la cruz” (Lumen gentium, 58), y afirma que esa unión “en la obra de la salvación se manifiesta desde el momento de la concepción virginal de Cristo hasta su muerte” (ib., 57). Esto es puro amor. 2. Por amor a los hermanos, María también está pronta a socorrer a quien le necesita en cada momento: - Después del relato del anuncio de la concepción de Jesús en el seno de María, la Virgen, San Lucas nos cuenta la visita que esta realiza inmediatamente a su pariente Isabel, es decir, la esposa de Zacarías, madre del que sería llamado “profeta del Altísimo” (cf. Lc 1,39-56). El texto comienza diciendo: “En aquellos días se levantó María y se fue con prontitud a la región montañosa, a una ciudad de Judea” (1,39). En este texto, María sale al encuentro de Isabel no solo para ponerse a su servicio, sino también como portadora del Salvador, pues tiene prisa en comunicar la Noticia y en regocijarse con la señal que le ha dado el ángel en Isabel. La referencia de Lucas a la región montañosa, la premura de María y la alegría del ambiente, han hecho pensar a muchos en una velada cita de Is 52,7: “¡Qué hermoso son sobre los montes los pies del mensajero que anuncia la paz, que trae las buenas nuevas, que anuncia la salvación, que dice a Sión: ‘Ya reina tu Dios!’”. De ser así, María surge en Lucas como la primera mensajera del Evangelio de Dios: lleva desde Galilea a la región de Judá la noticia de la paz, la felicidad y la salvación. Esta interpretación deja ver a una María que es enviada a comunicar la Buena Noticia de su Maestro, una María que no quiere esperar para comunicar la dicha que lleva en su vientre, una María que desde el instante del anuncio del ángel se hace discípula de su Hijo. - Las bodas de Caná (Jn 2,1-11): ¿Qué hace María? Participa en la fiesta y, por tanto, sirve, ayuda, conversa, pero también observa, con cierta distancia, lo que sucede en aquella fiesta. Su distancia atenta y discreta le permite ver lo que, de hecho, nadie ve, como es que el vino se ha terminado. Es decir, María está atenta al momento humano de la existencia, atenta a las situaciones, a las personas y a las cosas (cf. Cardenal C. Maria Martini, María, la mujer de la reconciliación, p. 13ss). - La última referencia de María en los escritos lucanos la encontramos en Hechos de los Apóstoles: “Todos ellos perseveraban en la oración, con un mismo espíritu en compañía de algunas mujeres, de María, la madre de Jesús, y de sus hermanos” (Hch 1,14). Ahora, en este segundo libro de San Lucas, María aparece entre la primera comunidad de creyentes, también como discípula, al lado de los otros discípulos compartiendo experiencias de fe. María ha sido llamada a un servicio muy particular respecto a Jesús y a favor del pueblo de Dios, a ella le ha sido dada también la más estrecha vinculación con Jesús. Ella pudo participar en el camino de Jesús desde el inicio hasta el anuncio a todo Israel. En María, madre de Jesús, comenzó la existencia terrena de Jesús y comienza la comunión de los hombres con él. María pertenece a la Iglesia, es decir, a los hombres que creen en Jesús y viven en comunión con él. En esta Iglesia, la madre de Jesús tiene un cometido muy específico y un puesto singular. De lo que se trata es que, en este mes mariano, podamos vivir un auténtico amor hacia María, vinculado, como no puede ser de otra manera, a la misión de su Hijo. Como recuerda el Concilio Vaticano II: “que la verdadera devoción no consiste ni en un sentimentalismo estéril y transitorio ni en una vana credulidad, sino que procede de la fe auténtica, que nos induce a reconocer la excelencia de la Madre de Dios, que nos impulsa a un amor filial hacia nuestra Madre y a la imitación de sus virtudes” (LG, 67). Teniendo en cuenta todo esto, podemos vivir las diversas devociones marianas. Entre ellas, es necesario destacar el Santo Rosario, que es una oración sugerida por el Magisterio de la Iglesia. En la sobriedad de sus elementos, tiene en sí la profundidad de todo el mensaje evangélico, del cual puede decirse que es un resumen. Además, la misma Virgen María, en sus apariciones, ha animado a rezar esta oración. El 13 de mayo de 1917, en su primera aparición en Fátima, María dijo: “Recen el Rosario todos los días para alcanzar la paz del mundo y el fin de la guerra” y en su última aparición en ese lugar la Madre de Dios se presentó como la “Señora del Rosario”. El Papa Pablo VI, definió el Rosario como “compendio de todo el Evangelio” (Exhortación Apostólica Marialis Cultus, 42). Por su parte, el Papa Francisco recordó que el 7 de octubre la Iglesia celebra a la Virgen del Rosario, y animó a rezarlo porque “el rezo del Rosario es la oración más hermosa que podemos ofrecer a la Virgen María; es una contemplación sobre las etapas de la vida de Jesús Salvador con su Madre María y es un arma que nos Protege de los males y de las tentaciones” (7 de octubre de 2020). Motivados, por todo esto, podemos vivir nuestro mes mariano. Ha resultado, en muchas parroquias, muy provechoso peregrinar la imagen de María de casa en casa, y rezar el rosario, y, el último día del mes de mayo, hacer la coronación de la Virgen. Es, asimismo, propicio en este mes, dar una catequesis y un curso de apologética sobre el papel de la Virgen en la historia de la salvación y en nuestras vidas, habida cuenta de la confusión que siembra en los corazones de los católicos la predicación agresiva de algunos grupos religiosos, muy presentes en nuestro territorio diocesano. Pongámonos en este mes de mayo y en toda nuestra vida bajo el auxilio de María, y contemos siempre con su ayuda ante nuestras necesidades para lograr ser nosotros, a imagen suya, verdaderos discípulos de Jesús. P. José Antonio Díaz Hernández Sacerdote de la Diócesis de Santa Marta

Mar 8 Mar 2022

Diócesis de Santa Marta abre espacio de diálogo con candidatos al Congreso

La Diócesis de Santa Marta facilitó, el pasado jueves 03 de marzo, un encuentro de oración y diálogo con los candidatos aspirantes a cargos del Senado y Cámara de Representantes, que viven en esta ciudad. Se trató de un espacio pedagógico donde se hizo primero la presentación de la Pastoral Social Diocesana, a cargo del padre Harold Porfirio Tejada, luego de ello, monseñor José Mario Bacci Trespalacios, obispo de la Diócesis de Santa Marta, a partir del mensaje de los obispos de Colombia sobre el próximo período electoral, propuso a los candidatos reflexionar sobre tres verbos: invitar, exhortar y comprometerse. El prelado hizo un llamado a todos los ciudadanos samarios, a los líderes políticos y a quienes viven dentro del territorio diocesano de Santa Marta para que, a conciencia, analicen la trayectoria y propuestas de los candidatos al Congreso y a la Presidencia de la República, que vean en ellos la capacidad de promover el bienestar, a partir de las necesidades de los territorios y el interés nacional; por ello llamó a votar libre y responsablemente, como fruto de una decisión informada y consciente; a favorecer la democracia y reclamar del Gobierno, garantías para prevenir delitos electorales. Exhortó a los líderes políticos a encontrar en el bien común, la motivación para su servicio, de modo que los clamores, sobre todo de los jóvenes y de los pobres, sean escuchados, y las problemáticas sociales que siguen sin respuesta, sean atendidas; a ejercer un liderazgo que incluya a todos en un proyecto de nación, que cuide la paz, acreciente la confianza en las instituciones y en el prójimo, y en el que cada uno sea artesano del desarrollo humano, económico y social; a impedir la corrupción, acatando la doctrina social de la Iglesia, la cual nos enseña que, “la política, tan denigrada, es una altísima vocación, es una de las formas más preciosas de la caridad” (Evangelii Gaudium, n. 205). En este encuentro, no podían faltar las personas pertenecientes al territorio de la Diócesis de Santa Marta, a quienes Monseñor Bacci invitó a construir con decisión y sin miedo un país mejor, permitiendo que las raíces cristianas muevan a la justicia, al diálogo y a la fraternidad; por ello recalcó, “es necesario el respeto a la vida humana en todas sus etapas y expresiones, la protección de la familia, el derecho a educar a los hijos, la libertad de conciencia y el cuidado de los ecosistemas, a dejar la intolerancia y la violencia, a emprender juntos la amistad social; a mirar con esperanza el futuro de Colombia”. Al final, en comunión con la Iglesia Universal, pidió al Espíritu, guía y protección, para que “nos regale más políticos a quienes les duela la sociedad, el pueblo y los pobres” (Evangelii Gaudium, 205). Fuente: Oficina de Comunicaciones Diócesis de Santa Marta Fotografía: Oficina de Comunicaciones Diócesis de Santa Marta

Vie 21 Ene 2022

Monseñor Bacci Trespalacios asumirá como nuevo obispo de Santa Marta

El martes 25 de enero a las 10:00 a.m., en el contexto de la fiesta litúrgica de la Conversión de San Pablo, bajo la aplicación de estrictas medidas de bioseguridad, para prevenir el Covid-19, será la ordenación episcopal y posesión canónica del nuevo obispo de Santa Marta, monseñor José Mario Bacci Trespalacios. La ordenación será presidida por monseñor Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá y primado de Colombia; los co-consagrantes monseñor Pablo Emiro Salas, arzobispo Metropolitano de Barranquilla y Monseñor Jorge Enrique Jiménez, arzobispo emérito de Cartagena. A su vez asistirán, aproximadamente 20 obispos, más de 120 sacerdotes de otras jurisdicciones de Colombia y de otros países. La ceremonia eucarística que se realizará en la Catedral Basílica Menor, el Sagrario y San Miguel, será transmitida a través del Canal Cristovisión, la emisora Voces 89.4 F.M., la emisora Minuto de Dios (1370 A.M.), Facebook de la Conferencia Episcopal @Episcopadocol - www.voces894fm.org - www.hoydiariodelmagdalena.com.co - www.radiohoy.com - www.elinformador.com.co - santamarta_informa (Instagram). Perfil de Monseñor José Mario Bacci Trespalacios Nació en Magangué (Bolívar) el 19 de marzo de 1971. Fue incorporado a la Congregación de Jesús y María – Padres Eudistas, el 19 de agosto de 1995, y el 17 de diciembre del mismo año fue ordenado presbítero. Inició la formación presbiteral en el Seminario San Carlos Borromeo de Cartagena, por la diócesis de Magangué. Allí cursó el año propedéutico (1988) y la etapa filosófica (1989-1990). Al iniciar la etapa teológica ingresó a la CJM. Estudió teología en la Pontificia Universidad Javeriana (1991-1994). Realizó estudios de Licenciatura en Sagrada Escritura en el Pontificio Instituto Bíblico de Roma (2007-2011). Cursó un semestre de estudios en la Ecole Biblique de Jerusalén (2011). Ha vivido sus 25 años de vida ministerial al servicio de la formación presbiteral en seminarios diocesanos en Ecuador (1994-1999), República Dominicana (1999-2001), Brasil (2001-2007) y Honduras (2012-2016). Allí desempeñó fue miembro del equipo de formación, encargado de la formación académica, docente en Sagrada Escritura y rector. Algunos de esos seminarios estaban vinculados a parroquias cercanas y en ellas colaboró pastoralmente. Desde el año 2016 fue Superior Provincial Eudista de Colombia. Desde el año 2019 ejerce el segundo período en este servicio dentro de su Congregación. El 19 de noviembre de 2021, el Santo Padre Francisco lo nombró obispo de la Diócesis de Santa Marta. Agenda para la ordenación y posesión del obispo

Mar 7 Dic 2021

Diócesis de Santa Marta expresa cercanía a familiares de víctimas por explosión

La Diócesis de Santa Marta, expresa sus sentimientos de tristeza y cercanía espiritual a los afectados por el incendio que se produjo, este domingo 05 de diciembre, tras una fuerte explosión en un almacén de pólvora que dejó como saldo dos personas fallecidas y dos más heridas. “Para con todas las personas y sus familias, que se vieron afectadas en esta tragedia, que enluta hoy a nuestro territorio, les manifestamos nuestra presencia y compañía en medio del dolor; recordando el mandato de Jesús de vivir la solidaridad con todos los hermanos”, señala la misiva firmada por el sacerdote Isidro de Jesús Castro, administrador diocesano de Santa Marta y quien expresa este sentimiento en nombre del obispo electo, José Mario Bacci Trespalacios. Descargar comunicado [icon class='fa fa-download fa-2x'] AQUÍ[/icon]

Lun 14 Jun 2021

Presentación Casa Cultural de Economía Naranja y Turismo: Museo Puccini

Bajo el slogan “¡Conviértete en patrocinador de tu historia!”, este martes 15 de junio, a las 10:00 de la mañana, la Diócesis de Santa Marta hará la presentación del proyecto: “La casa cultural de economía naranja y turismo: Museo Puccini”. Se trata de la construcción de una estructura donde los samarios y turistas podrán disfrutar de un paseo al Museo de Arte Religioso, para conocer una muestra impecable del mejor arte religioso y el archivo histórico de la Diócesis de Santa Marta, que refleja la tradición de fe de los samarios. Además, se adecuarán espacios para el funcionamiento de una capilla, del Instituto Teológico, el Centro de Escucha y Orientación Familiar (CEOF) y la sede para la Escuela Internacional de Turismo, donde se formarán prestadores de servicio a la sociedad, entre otras obras que allí funcionarán. Con este proyecto, la Iglesia particular de Santa Marta le estará aportando al desarrollo cultural, turístico, histórico y religioso de la ciudad. El padre Isidro de Jesús Castro, administrador diocesano, resaltó que esta obra es fruto de la voluntad de monseñor Luis Adriano Piedrahita, obispo de esta diócesis fallecido hace unos meses, quien inició este sueño que hoy se empieza a materializar gracias al apoyo de aliados estratégicos como: el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) y la Caja de Compensación Familiar del Magdalena (CAJAMAG). “Según el parecer de monseñor Luis Adriano Piedrahita, antes de fallecer, se convertirá la antigua sede del Colegio Parroquial, en un espacio interactivo y armónico, donde el rol de la Iglesia coincida con el desarrollo cultural, recreacional y turístico, transformándolo en referente para los ciudadanos propios y foráneos, que lleguen a la zona céntrica de Santa Marta”, afirmó el administrador diocesano. A través de un boletín de prensa, la Diócesis de Santa Marta ha dicho que se espera tener la “posibilidad de transformar la edificación en un verdadero paseo de interés, altamente disfrutable y sostenible, que aporte al progreso de la sociedad, a partir de esta propuesta de la primera Iglesia de América del Sur”. Por su parte, el padre Mario Arturo Monsalvo Bolaño, director de la Casa Cultural de Economía Naranja y Turismo: Museo Puccini, ha dicho que esta obra irá avanzando en la medida que se unan benefactores que aporten a este iniciativa, por lo que invita a “colaborar con esta propuesta y a ser parte de la misma, ya que, nuestra casa cultural, será una experiencia de acogida a quienes buscan vincularse con el patrimonio de nuestra Diócesis, que con fuerza innovadora avanza en la ruta histórica, religiosa y cultural”. Este evento eclesial será transmitido a través de la página diocesana de Facebook y la Emisora Voces 89.4 F.M. Los interesados en conocer más detalles de esta propuesta, lo podrán hacer comunicándose a los teléfonos 301 2845070 / 311 4587039

Mar 7 Jul 2020

Saludo Solidario del Episcopado colombiano al pueblo magdalenense

Durante la 110ª Asamblea Plenaria que se realiza por estos días de formar virtual, los obispos de Colombia, expresaron sus sentimientos de tristeza ante la tragedia ocurrida en Tasajera, corregimiento de Puebloviejo (Magdalena), donde fallecieron 7 personas y otras 49 resultaron heridas. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar comunicado[/icon]