Lun 19 Oct 2015
Que las familias ayuden a los pastores para llegar a los que están lejos
El vicepresidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, Oscar Urbina Ortega, afirmó que es una gran riqueza lo visto en el Sínodo y dijo que a su regreso al país entrará con todo el ánimo para implementar lo aprendido.
"Ha sido una riqueza muy grande el encontrarme con tantos padres sinodales de toda la tierra y entonces ver cómo las familias en cada uno de los lugares donde estamos tienen diversas preguntas, viven diversas situaciones, pero en el fondo este designio amoroso de Dios es para todas ellas. He aprendido mucho, me he enriquecido, voy muy contento porque en mi diócesis quiero hacer un trabajo sobre la renovación de la parroquia y un trabajo de acompañamiento pastoral a las familias", afirmó el jerarca.
Monseñor Urbina Ortega en diálogo con Radio Vaticana, hizo un breve recuento de la situación de pobreza y violencia que se vive en el territorio llanero, hecho que según el prelado ha sido causa de una desintegración en la familia.
"La familia ha perdido como su rostro porque el ser desplazado significa eso perder el rostro propio y poder sanar, poder recuperar ese es un gran desafío que yo en este momento tengo (...) La guerra también nos ha destruido en ese sentido y es a partir de una ética cristiana donde se pueden reconstruir las relaciones, primero en la familia para que se evite la violencia intrafamiliar y hacia afuera para que sean historias de paz, de perdón, de reconciliación y de amor", aseveró.
El jerarca se mostró optimista de saber que los aportes que saldrán de este Sínodo serán muy comprensibles y de fácil aplicación para el desarrollo de una pastoral de la familia, que permitan buscar nuevos caminos para proteger los valores de la familia.
"Yo pienso que el instrumento que saldrá de este Sínodo se está buscando que sea muy comprensible entonces la difusión y sobre todo la aplicación de él y el desatar en mi diócesis un compromiso muy grande de las familias que están más cercanas sean una mano, sean los pies, sean el corazón, sean los ojos que alargan nuestra presencia de pastores para llegar a los que están lejos, a los que sufren, a los que tienen necesidad de nuestro apoyo", aseguró.
La XIV Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos inició el 4 de octubre y sesionará hasta el próximo 25 del mismo mes, ha sido un espacio donde se ha debatido sobre la vocación y la misión de la familia en la Iglesia y en el mundo contemporáneo.