Pasar al contenido principal

Actualidad

Mar 7 Mayo 2019

Nuncio Apostólico preocupado por líderes sociales y Venezuela

En el marco del IX Encuentro de la Red de Universidades Católicas de Colombia, el Nuncio Apostólico, monseñor Luis Mariano Montemayor, se refirió a la preocupante situación de las amenazas y asesinatos de líderes sociales en el país. “Creo que tenemos que tomar en serio el tema de la paz, porque el tema de la paz no es opcional. Colombia no puede seguir en esta violencia extrema de la eliminación del adversario y de quien piensa diferente, el trabajo de una mentalidad inclusiva es esencial. O nos salvamos todos o nos hundiremos todos”, afirmó. El prelado expresó que el tema de la paz no puede ser indiferente para los colombianos, ni para la comunidad internacional, ante el incremento de fuerzas organizadas y criminales “que están en contra del cese de violencia en el país y hay que combatirlas con eficacia”. Aseguró que si bien es tarea del Estado proteger a los ciudadanos, pidió también a la sociedad civil aportar en este proceso de salvaguardar la vida de los líderes sociales. Monseñor Montemayor también se refirió a la crisis de Venezuela. El representante del Vaticano dijo que es importante que en este país no se de una guerra civil, porque los primeros en sufrir las consecuencias serían los colombianos. “Masas de venezolanos que pueden huir de frentes de guerra, yo viví eso en la República Democrática del Congo y sé cómo es. Tratemos de dar iniciativas que no empeoren los problemas. Parémonos con paciencia porque este es un problema que vamos a cargar por mucho tiempo”, explicó. Resaltó la tarea de acompañamiento que está realizando la Iglesia colombiana en las zonas fronterizas. Solo en Cúcuta la diócesis está entregando 12 mil almuerzos diarios a los refugiados. “Mil almuerzos en Arauca, quinientos en Valledupar y así en otras zonas del país; no son los únicos también el sector empresarial está apoyando”. Foto: Fundación Universitaria Juan de Castellanos (Tunja)

Vie 3 Mayo 2019

“No todo está perdido en Colombia”

Así lo afirmó Monseñor Óscar Urbina Ortega, presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, quien presidió, en la mañana de este viernes 03 de mayo, la eucaristía, en la Fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz y el Día de la Reconciliación, instituido tras la visita apostólica del Papa Francisco a Colombia, en septiembre de 2017. En su homilía, el Prelado recordó que, a pesar del sombrío panorama que vive el país en aspectos sociales, políticos, culturales, económicos, donde se continúa la agresión contra niños, mujeres y ancianos, aún hay esperanza para todos, “los que han promovido violencia y los que han sido víctimas”. “Así como la cruz produjo tantas lágrimas para Jesús, para María, los discípulos y las mujeres que lo siguieron hasta el calvario, esa misma cruz puede comunicarnos libertad, sanación, redención, liberación, reconciliación y vida fraterna que origina una verdadera cultura del encuentro en nuestras familias que hoy también son azotadas por la plaga de la violencia intrafamiliar”, aseveró. El también arzobispo de Villavicencio exhortó a las familias y a la sociedad en general a no dejarse esclavizar por el odio y la indiferencia “que están sumergiendo a niños y jóvenes en el consumo de la droga, el suicidio y la violencia” – continuó – “Tenemos la fuerza que brota de nuestra fe para hacer renacer nuestras vidas, nuestra vivencia ética, el cultivo de los valores auténticos y perennes que nos vienen del Evangelio”. Monseñor Urbina Ortega, detuvo su reflexión en el Evangelio de San Juan que muestra la figura de la serpiente, que dejando “de arrastrarse por la tierra se levanta entre el cielo y la tierra para sanar las heridas y el veneno de su mordedura”. “La serpiente es símbolo de amenaza, de terror por su veneno. Se relaciona con las heridas que llevamos en el corazón y que son más profundas y difíciles de sanar que las del cuerpo. Pero, la serpiente por su cambio de piel es la imagen de nuestra reconstrucción humana: es preciso liberarnos de la vieja envoltura del rencor y abrazar en la cruz el amor que libera y reconstruye”, afirmó. En su reflexión, el Prelado recordó la Pascua que la Iglesia católica está viviendo, e hizo un fuerte llamado a que florezca en los colombianos la vida y la resurrección “para que, junto a Cristo, bajo la sombra de su árbol santo, aprendamos la fuerza del perdón y la grandeza de su entrega y de su amor”, concluyó. Esta eucaristía conmemora la segunda jornada de oración y reflexión sobre la reconciliación del país, evocando los 17 años de una de las peores masacres que ocurrió en el municipio de Bojayá, departamento de Chocó. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar homilía[/icon]

Mié 1 Mayo 2019

“Vivamos con responsabilidad y alegría el trabajo que realizamos”

Es la invitación de Monseñor Oscar Urbina, Arzobispo de Villavicencio y presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, en el Día Internacional de los trabajadores, que se conmemora el 1 de mayo. El prelado, tras enviar un saludo y bendición a todos los que trabajan en el campo, en las ciudades y poblaciones, les invitó a vivir con responsabilidad “el trabajo, pequeño o grande que realicemos”, pues este “nos permite vivir nuestra dignidad humana (…) y sostener la familia”. Finalmente, hizo un llamado para que se atienda y acompañe a quienes le hace falta el trabajo, de manera especial, a los migrantes, a quienes pidió “acojamos, acompañemos, protejamos y si podemos ofrecerles un trabajo, que sea también digno para ellos y su familia”.

Mié 24 Abr 2019

CEC manifiesta cercanía con Francia, tras el incendio en Notre-Dame

En un mensaje dirigido a Monseñor Georges Pontier, Arzobispo de Marselle y Presidente de la Conferencia de Obispos de Francia, la Conferencia Episcopal de Colombia expresa sus condolencias por el terrible incendio que devastó parte de la catedral de Notre-Dame, patrimonio histórico y religioso de este país y de la humanidad. “Nosotros hemos seguido con mucho dolor las noticias acerca de esta tragedia, pero también sentimos igualmente la esperanza cuando hemos visto a los jóvenes y a la población que se han reunido para orar y cantar cánticos en honor de la Virgen alrededor de la Catedral. Nosotros tenemos grande admiración por esta Iglesia valiente que ha dado testimonio de su fe delante del mundo el día del incendio”, señala la comunicación. En la misiva firmada por monseñor Oscar Urbina Ortega, presidente del episcopado, también se manifiesta la gratitud y cercanía con la Iglesia francesa y sus organizaciones, que por años han apoyado a la Iglesia colombiana. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar carta[/icon]

Mar 23 Abr 2019

Obispos de Colombia manifiestan su solidaridad con la comunidad de Sri Lanka

En un mensaje dirigido a Mons. Julian Winston Sebastian Fernando, s.s.s, Obispo de Badulla y presidente de la Conferencia Episcopal de Sri Lanka, la Conferencia de Obispos Católicos de Colombia lamentan y condenan los actos terroristas perpetrados contra la comunidad cristiana de Sri Lanka el pasado 21 de abril, día de Pascua. “Colombia se une a la plegaria que se hace en el mundo entero por la comunidad cristiana de Sri Lanka (…) Nos sentimos unidos a su intenso dolor. Con nuestras comunidades oramos para que el Señor regale el eterno descanso a los fallecidos, así como consuelo y esperanza a sus familiares”, se lee en la misiva. Según cifras oficiales el atentado terrorista deja a la fecha un saldo de 290 víctimas mortales y 500 heridos. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar comunicado[/icon]

Mar 23 Abr 2019

Episcopado lamenta fallecimiento del sacerdote Maurizio Pontín

La Conferencia Episcopal y el Secretariado Permanente del Episcopado Colombiano –SPEC- lamentan el fallecimiento del sacerdote italiano Maurizio Pontín, misionero scalabriniano, y se unen en oración de acción de gracias por su vida y ministerio. Resaltan la labor realizada por el padre Pontín como coordinador del área de Movilidad Humana, en el Secretariado Nacional de Pastoral Social en el año 2002. El Episcopado recuerda a este insigne sacerdote como un hombre con alto sentido de servicio misionero y de ayuda a los migrantes, lo que le permitió hacer un gran aporte en este campo a la Iglesia en Colombia. Expresa el saludo de condolencia a los Padres de la Congregación de los Misioneros de San Carlos - Scalabrinianos, donde compartió su gran testimonio de vida y ministerio sacerdotal. Velación: Parroquia Beato Juan Bautista Scalabrini (Calle 136 No. 153-76 Barrio Lisboa). Sus exequias se realizarán el próximo jueves 25 de abril a las 2:00 pm. en la Catedral de Engativá San Juan Bautista de la Estrada.

Lun 22 Abr 2019

Solidaridad con los damnificados por el invierno

Los obispos católicos de Colombia manifestaron su dolor por las víctimas mortales y damnificados que dejó el alud de tierra en la zona rural del municipio de Rosas (Cauca). Los prelados ofrecieron sus plegarias por el eterno descanso de quienes perdieron la vida a causa del desastre natural ocurrido el 21 de abril, en horas de la madrugada. Asimismo, aseguraron su solidaridad con los damnificados de las inundaciones en las diferentes regiones del país, de manera particular en la zona de Tumaco (Nariño) y los municipios vecinos. Expresaron su cercanía a los obispos, sacerdotes y laicos de estas regiones, quienes de manera activa están haciendo presencia para acompañar a las comunidades afectadas. Finalmente, hicieron un llamado a la solidaridad de los colombianos para que ofrezcan sus oraciones y auxilio en ayudas, a través de los canales que indiquen las respectivas jurisdicciones. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar comunicado[/icon]

Dom 21 Abr 2019

"Aceptemos al Señor y vivamos intensamente la Pascua que hoy inicia”, Card. Salazar

E·l Cardenal colombiano, Rubén Salazar Gómez ofreció un saludo de Pascua a todo el pueblo católico y recordó el significado de esta palabra “La Pascua es el paso de la muerte a la vida”. El también Arzobispo de Bogotà, afirmó que desear felices pascuas significaba ser capaz de transformar la vida, “pasar de la muerte del egoísmo, del odio y del rencor, a la vida del amor, volver al perdón, la fraternidad y a la solidaridad”. Propuso a la comunidad cristiana ser capaz de transformar la propia existencia, el ambiente familiar, de trabajo, de las ciudades y en general del mundo entero, confiado a que estas acciones llevarán consigo al amor, la justicia, el respeto y el perdón.