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12 de abril | Lectura del santo Evangelio según san Lucas 24, 13-35
Tags: evangelio Abril san lucas Iglesia católica iglesia católica
Lo reconocieron al partir el pan
AQUEL mismo día, el primero de la semana, dos de los discípulos de Jesús iban caminando a una aldea llamada Emaús, distante de Jerusalén unos sesenta estadios; iban conversando entre ellos de todo lo que había sucedido. Mientras conversaban y discutían, Jesús en persona se acercó y se puso a caminar con ellos. Pero sus ojos no eran capaces de reconocerlo. Él les dijo: «¿Qué conversación es esa que traen mientras van de camino?». Ellos se detuvieron con aire entristecido. Y uno de ellos, que se llamaba Cleofás, le respondió: «¿Eres tú el único forastero en Jerusalén que no sabes lo que ha pasado allí estos días?». Él les dijo: «¿Qué?». Ellos le contestaron: «Lo de Jesús el Nazareno, que fue un profeta poderoso en obras y palabras, ante Dios y ante todo el pueblo; cómo lo entregaron los sumos sacerdotes y nuestros jefes para que lo condenaran a muerte, y lo crucificaron. Nosotros esperábamos que él iba a liberar a Israel, pero, con todo esto, ya estamos en el tercer día desde que esto sucedió. Es verdad que algunas mujeres de nuestro grupo nos han sobresaltado, pues habiendo ido muy de mañana al sepulcro, y no habiendo encontrado su cuerpo, vinieron diciendo que incluso habían visto una aparición de ángeles, que dicen que está vivo. Algunos de los nuestros fueron también al sepulcro y lo encontraron como habían dicho las mujeres; pero a él no lo vieron». Entonces él les dijo: «¡Qué necios y torpes son para creer lo que dijeron los profetas! ¿No era necesario que el Mesías padeciera esto y entrara así en su gloria?». Y, comenzando por Moisés y siguiendo por todos los profetas, les explicó lo que se refería a él en todas las Escrituras. Llegaron cerca de la aldea adonde iban y él simuló que iba a seguir caminando; pero ellos le apremiaron, diciendo: «Quédate con nosotros, porque atardece y el día va de caída». Y entró para quedarse con ellos. Sentado a la mesa con ellos, tomó el pan, pronunció la bendición, lo partió y se lo iba dando. A ellos se les abrieron los ojos y lo reconocieron. Pero él desapareció de su vista. Y se dijeron el uno al otro: «¿No ardía nuestro corazón mientras nos hablaba por el camino y nos explicaba las Escrituras?». Y, levantándose en aquel momento, se volvieron a Jerusalén, donde encontraron reunidos a los Once con sus compañeros, que estaban diciendo: «Era verdad, ha resucitado el Señor y se ha aparecido a Simón». Y ellos contaron lo que les había pasado por el camino y cómo lo habían reconocido al partir el pan.
Palabra del Señor.
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Mar 5 Nov 2024
6 de noviembre | Lectura del santo Evangelio según San Lucas 14, 25-33
Lectura del santo Evangelio según san Lucas.EN aquel tiempo, mucha gente acompañaba a Jesús; él se volvió y les dijo:«Si alguno viene a mí y no pospone a su padre y a su madre, a su mujer y a sus hijos, a sus hermanos y a sus hermanas, e incluso a sí mismo, no puede ser discípulo mío.Quién no carga con su cruz y viene en pos de mí, no puede ser discípulo mío.Así, ¿quién de ustedes, si quiere construir una torre, no se sienta primero a calcular los gastos, a ver si tiene para terminarla?No sea que, si echa los cimientos y no puede acabarla, se pongan a burlarse de él los que miran, diciendo:"Este hombre empezó a construir y no pudo acabar".¿O qué rey, si va a dar la batalla a otro rey, no se sienta primero a deliberar si con diez mil hombres podrá salir al paso del que lo ataca con veinte mil?Y si no, cuando el otro está todavía lejos, envía legados para pedir condiciones de paz.Así pues, todo aquel de entre ustedes que no renuncia a todos sus bienes no puede ser discípulo mío».Palabra del Señor.
Lun 4 Nov 2024
5 de noviembre | Lectura del santo Evangelio según San Lucas 14, 15-24
Lectura del santo Evangelio según san Lucas.EN aquel tiempo, uno de los comensales dijo a Jesús:«¡Bienaventurado el que coma en el reino de Dios!».Jesús le contestó:«Un hombre daba un gran banquete y convidó a mucha gente; a la hora del banquete mandó a su criado a avisar a los convidados:"Vengan, que ya está preparado".Pero todos a una empezaron a excusarse.El primero dijo:"He comprado un campo y necesito ir a verlo. Dispénsame, por favor".Otro dijo:"He comprado cinco yuntas de bueyes y voy a probarlas. Dispénsame por favor".Otro dijo:"Me acabo de casar y, por ello, no puedo ir".El criado volvió a contárselo a su señor. Entonces el dueño de casa, indignado, dijo a su criado:"Sal aprisa a las plazas y calles de la ciudad y tráete aquí a los pobres, a los lisiados, a los ciegos y a los cojos".El criado dijo:"Señor, se ha hecho lo que mandaste, y todavía queda sitio".Entonces el señor dijo al criado:"Sal por los caminos y senderos, e insísteles hasta que entren y se llene mi casa.Y les digo que ninguno de aquellos convidados probará mi banquete"».Palabra del Señor.
Dom 3 Nov 2024
4 de noviembre | Lectura del santo Evangelio según San Lucas 14, 12-14
Lectura del santo Evangelio según san Lucas.EN aquel tiempo, Jesús dijo a uno de los principales fariseos que lo había invitado:«Cuando des una comida o una cena, no invites a tus amigos, ni a tus hermanos, ni a tus parientes, ni a los vecinos ricos; porque corresponderán invitándote, y quedarás pagado.Cuando des un banquete, invita a pobres, lisiados, cojos y ciegos; y serás bienaventurado, porque no pueden pagarte; te pagarán en la resurrección de los justos».Palabra del Señor.
Sáb 2 Nov 2024
3 de noviembre | Lectura del santo Evangelio según San Marcos 12, 28b-34
Lectura del santo Evangelio según san Marcos.EN aquel tiempo, un escriba se acercó a Jesús y le preguntó:«¿Qué mandamiento es el primero de todos?»Respondió Jesús:«El primero es: "Escucha, Israel, el Señor, nuestro Dios, es el único Señor: amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente, con todo tu ser". El segundo es este: "Amarás a tu prójimo como a ti mismo". No hay mandamiento mayor que estos».El escriba replicó:«Muy bien, Maestro, sin duda tienes razón cuando dices que el Señor es uno solo y no hay otro fuera de él; y que amarlo con todo el corazón, con todo el entendimiento y con todo el ser, y amar al prójimo como a uno mismo vale más que todos los holocaustos y sacrificios».Jesús, viendo que había respondido sensatamente, le dijo:«No estás lejos del reino de Dios».Y nadie se atrevió a hacerle más preguntas.Palabra del Señor.