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¿Qué es lo mínimo que se necesita en Colombia para construir reconciliación y paz territorial? Iglesia da a conocer las respuestas de las comunidades
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El pasado jueves, 13 de marzo, la Comisión de Conciliación Nacional (CCN), organismo adscrito a la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), presentó el documento final del proceso de renovación de los “Mínimos para la reconciliación, la paz y el desarrollo en Colombia”. Una iniciativa que, desde el año 2020, ha buscado identificar, integrar y visibilizar la voz de cerca de 6.200 líderes y lideresas de los 32 departamentos del país, frente a las necesidades y desafíos estructurales que presentan actualmente los territorios para la construcción de paz.
El texto presentado por la CCN plantea un primer elemento transversal a todos los demás que, además, es central en la misión de la Iglesia: la protección de la vida y la dignidad humana. En este caso, se aborda desde el Derecho Internacional Humanitario, como “un llamado humanitario esencial a los actores ilegales del conflicto armado y al Estado para que se logren pactos vitales, acuerdos humanitarios, ceses al fuego recíprocos o, incluso, unilaterales no solo como señal de paz y verdadera disposición de diálogo y búsqueda de soluciones y salidas políticas, sino como necesidad o presupuesto de humanidad fundamental”.
A partir de esta primera dimensión, se plantean diez “mínimos”: 1.Cultura política para la democracia y la cultura de paz como solución real de los conflictos sociales. 2. Superación del problema de la corrupción, ineficiencia e ineficacia institucional. 3. Superación del modelo económico extractivista por un modelo de economías diversas y autosostenibles. 4. Descentralización de la administración pública y de los recursos para el desarrollo territorial económico y social. 5. Renovación territorial para la equidad económica, la autonomía alimentaria, la sostenibilidad agrícola, la conservación ambiental y el mejoramiento climático del país. 6. Superación de la pobreza multidimensional y de su impacto sobre las familias y las poblaciones más vulnerables. 7. Solución al problema de las economías ilícitas y el incremento de grupos armados organizados. 8. Seguridad humana para la protección de la vida, que incluye prioritariamente, la erradicación del reclutamiento forzado de niños, niñas, adolescentes y jóvenes (NNAJ). 9. Salud mental colectiva para la superación de los traumas de la violencia sociopolítica, el conflicto armado y la pandemia del covid-19 en Colombia. 10. Acceso a información mediática veraz, contextualizada, despolitizada y objetiva.
“Se les denomina mínimos, pero en el fondo constituyen una búsqueda de máximos de verdad, justicia, reparación y restauración del tejido social, lo cual pasa por una seria y profunda transformación de las dinámicas que han dado pie a la gran deuda social de desarrollo humano integral incluyente y a la consolidación de una democracia que avance de lo formal a lo real. Dado que se considera, por ejemplo, que no podemos avanzar a un país en paz social, si no se supera la corrupción que se roba los recursos de inversión del Estado necesarios para apoyar el resurgimiento del campo colombiano; de igual manera, la aplicación de una necesaria reforma no solo agraria, sino rural integral, así como de reformas sociales en materia de calidad de empleo, restauración de los derechos a la salud y la educación, derechos estos que requieren que los recursos que se destinan para su atención no se esfumen por arte de los corruptos”, enfatiza el padre Eliecer Soto Ardila, secretario general de la Comisión de Conciliación Nacional.
Con este resultado, que también se ha hecho posible gracias a la articulación entre la CCN y las arquidiócesis, diócesis y vicariatos apostólicos del país, la Iglesia buscará ayudar a las comunidades a incidir en diversos espacios institucionales que faciliten la implementación de iniciativas y políticas públicas para la reconciliación y la paz.
Bajo un compromiso decidido con aportar a esta importante misión de la Iglesia colombiana, la Conferencia Episcopal Italiana aportó los recursos para el desarrollo de la iniciativa en sus diferentes fases: consultas a líderes de las comunidades, a miembros de diversos sectores de la sociedad y apersonas de otras confesiones religiosas; sistematización y análisis de la información, reuniones con representantes de instituciones públicas para presentar resultados parciales de la investigación a nivel local y regional; encuentros con periodistas para socializar el proceso.
En el evento de presentación, llevado a cabo en la sede del episcopado colombiano, estuvo presente monseñor Luis Manuel Alí Herrera, obispo auxiliar de Bogotá y secretario general de la CEC. Intervino el Nuncio Apostólico en Colombia, monseñor Paolo Rudelli. Participaron de manera presencial los obispos de Yopal, Villavicencio, y Magangué. Los prelados de Santa Marta e Istmina-Tadó participaron de manera virtual para hablar de la experiencia vivida en sus jurisdicciones a través del proyecto. Además, sacerdotes, religiosas, agentes pastorales, líderes y lideresas comunitarias que aportaron en el proceso, así como representantes de embajadas de Chile, México y Cuba, así como de organismos de cooperación internacional.
El cardenal Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá, presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia y, a su vez, de la Comisión de Conciliación Nacional, envió un mensaje especial a todos los asistentes destacando el valor del diálogo amplio y el trabajo conjunto que ha tenido esta iniciativa:
“Queridos hermanos, ustedes que están allí en cada una de las regiones, acompañando al pueblo de Dios, saben que el camino de la reconciliación y la paz continua, que es un esfuerzo, una tarea permanente, un tejer juntos. Yo quiero llamarlos a eso, a tejer juntos. No podemos dedicarnos individualmente a este trabajo de la reconciliación y la paz. Estamos llamados a la comunión misionera dentro de la Iglesia para servirle mejor a nuestras regiones en nombre del Evangelio, en nombre de Jesucristo, el Señor. Pero a la vez, es necesario que articulamos con entidades nacionales e internacionales, organismos que están trabajando también con distintas motivaciones para que Colombia vaya avanzando en ese camino de reconciliación y paz”.
Por su parte, monseñor Paolo Rudelli, valoró la relevancia de este trabajo desde el punto de vista de la integración con los diferentes actores de la sociedad civil y desde la posibilidad de identificar las raíces del conflicto. Remarcó que puede representar un punto de partida para que el país se ponga de acuerdo, ”por lo menos en los fundamental”, para la construcción de la paz, tan necesaria.
“Una felicitación a la Comisión de Conciliación Nacional y ahora un animar a todos a hacer que estos mínimos no se queden como letra muertas, que no se queden en el papel, sino que sigan. Para nosotros como Iglesia Católica serán un poco un punto de referencia para nuestro trabajo que tratamos de hacer en colaboración con todos los otros componentes de la sociedad para construir paz y reconciliación. La palabra mínimos significa esenciales. no son para nada cosas pequeñas, pero sin las cuales la paz no puede ser construida (…) Sí, hay situaciones muy distintas, pero las que sufren son las poblaciónes y ahí, creo, la Iglesia está presente como un factor de reconciliación, para tratar por lo menos de aliviar las consecuencias”, afirmó el representante del Santo Padre en Colombia.
El documento final de los mínimos puede ser consultado y descargado directamente desde la página de la Comisión de Conciliación Nacional (www.comisiondeconciliacion.co), sección “Publicaciones” o ingresando aquí.
Vea a continuación el video de presentación de los mínimos:
Vea a continuación la transmisión del evento de lanzamiento:
“El divorcio exprés”: una píldora que no sana
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Una sociedad que odia a los niños
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Mar 24 Dic 2024
Navidad 2024: Vicepresidente del Episcopado Colombiano pide a los fieles liberar la Navidad del consumismo y aportar en la construcción de la paz
Al celebrar esta Navidad 2024, los obispos colombianos, a través del arzobispo de Tunja y vicepresidente de la Conferencia Episcopal, monseñor Gabriel Ángel Villa Vahos, piden a los fieles asumir este tiempo desde el amor, mientras reflexionan sobre su papel en la construcción de un futuro mejor para el país, donde la paz, tan anhelada por todos, se pueda hacer realidad con el aporte de cada uno.En su mensaje, el prelado subraya que la paz no es solo un don divino, sino también una tarea que exige el esfuerzo de cada persona desde lo más profundo de su corazón. "Preguntémonos: ¿qué estoy dispuesto a aportar yo para la construcción de la paz?", expresa.En línea con las palabras del papa Francisco, el vicepresidente del episcopado colombiano también llama a liberar la Navidad de todo aquello que no refleja su verdadero sentido, como el consumismo, los odios, los rencores y las venganzas:"Que este tiempo sea también de unión familiar, de sacar de nuestro corazón todo asomo de rencor, de violencia, de venganza".Además, recuerda que el Santo Padre, al convocar el Jubileo de la Esperanza, que se inaugurará en Roma el 25 de diciembre y, en las diócesis colombianas, el 29 de diciembre, está invitando a todos los creyentes a renovar su confianza en el Señor y a caminar como "peregrinos de la esperanza"."Les estamos deseando a todos una muy Feliz Navidad 2024. Que Santa María, Nuestra Señora de la Esperanza, camine con nosotros en este peregrinar. Bendiciones", concluye monseñor Villa.Vea el mensaje a continuación:
Mié 11 Dic 2024
¿Cómo vivir el Jubileo de la Esperanza 2025 en la Iglesia colombiana? La Conferencia Episcopal lanza un libro con orientaciones
La Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), a través de su Secretariado Permanente, presenta un nuevo libro titulado "Caminar en esperanza". Su contenido busca ayudar a las comunidades católicas del país a reflexionar y vivir plenamente el Jubileo Ordinario del 2025 convocado por el papa Francisco bajo el lema “Peregrinos de la esperanza”. Más que un material de lectura tradicional, es una ruta concreta para orientar a todos los miembros de la Iglesia en un peregrinaje hacia la renovación de su fe y compromiso cristiano, especialmente en medio de un contexto nacional y mundial marcado por profundas incertidumbres y temores sociales y políticos.Este compendio de 137 páginas, concebido como una guía práctica y espiritual, ofrece reflexiones, talleres y recursos para que los fieles católicos colombianos incorporen la esperanza en su vivencia diaria y en sus dinámicas pastorales desde distintas dimensiones. Entre ellas, en la Biblia, en los padres de la Iglesia, a nivel litúrgico, desde el rol de sacerdotes y religiosos, en la familia, en la misión, a nivel social, desde la comunicación y desde los signos de los tiempos. En la presentación del libro y evocando las palabras del papa Francisco, quien en su exhortación Spes non confundit resalta que la esperanza es la virtud que “indica la dirección y la finalidad de la existencia cristiana”, el presidente de la CEC, monseñor Francisco Javier Múnera Correa, destacó que este tiempo jubilar es una oportunidad para fortalecer la virtud de la esperanza, que orienta y sostiene la vida cristiana. A partir de esta premisa, se invita a los fieles a reconocer que la esperanza tiene un rostro: Jesucristo, quien camina con la humanidad como peregrino para guiarla hacia el Padre."Caminar en esperanza" es una invitación de la Conferencia Episcopal de Colombia a fomentar la comunión en los diversos espacios eclesiales del país; desde las parroquias hasta las familias, así lo expresa su presidente, monseñor Francisco Múnera:“Deseo que este material sea acogido en todos los lugares eclesiales para la vivencia de la comunión en nuestro país; y que, en aquellos espacios vitales, se asuma con esperanza el seguimiento del Señor Jesucristo, nuestra paz, y con este horizonte podamos fomentar las relaciones, los procesos y los vínculos necesarios para una Iglesia sinodal, misionera y misericordiosa, como lo pide el Proceso Sinodal”.El libro ya puede ser adquirido a través de la Librería de la Conferencia Episcopal de Colombia o en las librerías San Pablo del país.Datos de contacto:Correo: libreria@cec.org.coWhatsApp: 3138808447Teléfono: PBX (57) 601 9157779 Ext. 125Horario de atención:Lunes a viernes 8:00 a.m. - 12:30 p.m. / 1:30 p.m. - 4:30 p.m.
Mar 10 Dic 2024
La Diócesis de San José del Guaviare ya tiene Administrador Diocesano: Pbro. Edgar Liévano Labrador
El Colegio de Consultores de la Diócesis de San José del Guaviare eligió a su nuevo administrador. Se trata del padre Edgar Liévano Labrador, quien se venía desempeñando como vicario general de esa Iglesia particular ubicada en el departamento del Guaviare. La nueva designación por parte de los sacerdotes se dio este 6 de diciembre, tras la posesión del anterior obispo de esta jurisdicción, monseñor Nelson Jair Cardona, en la Diócesis de Pereira.El padre Edgar Liévano Labrador nació el 10 de agosto de 1955 en Ibagué (Tolima). Cursó sus estudios de teología en el Seminario IntermisionalSan Luis Beltrán de Bogotá. Fue ordenado sacerdote el 26 de marzo de 1988 para la Prefectura Apostólica de Mitú. Estudió una licenciatura en Filosofía y Educación Religiosa en la Universidad Católica de Oriente y una especialización en Derecho Matrimonial Canónico en la Pontificia Universidad Javeriana.Los encargos pastorales que ha desempeñado son:Párroco de la Parroquia San Antonio de Carurú- Vaupés (1988)Párroco de la Parroquia Cristo Rey de Calamar-Guaviare (1989-1995)Párroco de la Inmaculada Concepción de San José (1996-2001)Fundación de la Parroquia Nuestra Señora de la Paz de San José (2001-2003)Párroco de la Parroquia Divino Niño de Puerto Concordia-Meta (2004)Administrador Parroquial de la Parroquia La Sagrada Familia de San José (2005-2007)Párroco de la Parroquia Nuestra Señora de la Paz de san José (2008-2011)párroco de la Parroquia María Auxiliadora de San JoséPárroco de la Parroquia Catedral de San José (2015-2020)Párroco de la Parroquia Nuestra Señora de la Paz de san José (2020 hasta la fecha)Provicario del Vicariato apostólico de San José del Guaviare (1999)Vicario General (2000-2003, 2006-2010 y 2016 hasta la fecha)Canciller y notario (2006 hasta la fecha)Actualmente es miembro del Consejo Presbiteral y del Colegio de Consultores.En diálogo con el Departamento de Comunicaciones de la Conferencia Episcopal de Colombia, el padre Edgar Liévano expresó su gratitud hacia los sacerdotes que conforman el Colegio de Consultores de la Diócesis de San José del Guaviare, por haber confiado en él para guiar esta Iglesia particular. En ese sentido, dio a conocer tres prioridades pastorales:“Seguiré con la ayuda de Dios y las oraciones de los fieles, trabajando en el Plan de Pastoral y en su implementación; en el crecimiento fraterno y espiritual del clero, religiosos y religiosas; y en la ayuda para con los pobres y necesitados. Dios me ayude en este trabajo que ha puesto en mis manos”, expresó el sacerdote.El padre Liévano estará desarrollando este encargo hasta que se produzca un nuevo nombramiento episcopal para esa jurisdicción eclesiástica por parte del Santo Padre.
Sáb 7 Dic 2024
El papa Francisco nombró nuevo obispo para la Diócesis de Buga: Pbro. Alexander Matiz Atencio
Este sábado, 7 de diciembre, el papa Francisco designó nuevo obispo para la Diócesis de Buga. Se trata del padre Alexander Matiz Atencio, sacerdote de la Arquidiócesis de Cali, quien se venía desempeñando como Vicario Episcopal de Economía en esa jurisdicción eclesiástica.Desde mayo de 2012, la Diócesis de Buga venía siendo pastoreada por monseñor José Roberto Ospina Leongómez quien, en 2022, al cumplir sus 75 años de edad, y como lo estipula el Código de Derecho Canónico, había presentado su renuncia al Sumo Pontífice.El obispo electo de Buga ha desempeñado importantes roles pastorales en la Arquidiócesis de Cali, entre ellos, Director Comisión de Vida Justicia y Paz y Director de Pastoral Social, entre los años 2002 y 2012.De manera especial, en 1995, con el aval de monseñor Isaías Duarte Cancino y el apoyo de la Arquidiócesis de Cali y diferentes actores de la sociedad civil, el padre Alexander Matiz inició la creación de la Fundación Sergente. Obra que tiene el propósito de “atender a las personas más vulnerables, los habitantes de y en calle, carentes de recursos para su autocuidado y vida digna, con el fin de asistirlos, promoverlos e incluirlos nuevamente en la sociedad”. BiografíaEl padre Alexander Matiz Atencio nació el 4 de agosto de 1960 en Pasto (Nariño).Cursó sus estudios de Filosofía y Teología en el Seminario Mayor San Pedro Apóstol de Cali y fue ordenado sacerdote el 25 de noviembre de 1990, incardinándose en la Arquidiócesis de Cali.En 1986 obtuvo su profesionalización como Arquitecto de la Universidad del Valle; se especializó en Gerencia de Talento Humano en la Unicatólica; cursó un Diplomado en Alta Gerencia de la Universidad de Los Andes y estudios en liturgia y arte sagrado en el Centro de Pastoral Litúrgica de Cataluña.Ha desempeñado los siguientes encargos pastorales:Administrador Parroquial de San José Obrero (1990-1993)Vicario Parroquial en Barcelona – España (1993-1995)Administrador Parroquial de María Madre de Dios (1995-1997)Director de Liturgia Arquidiócesis de Cali (1996)Párroco de Jesús Obrero (1997 - 2003)Director Comisión de Vida Justicia y Paz (2002-2012)Director de Pastoral Social (2002-2012)Párroco de San Juan Evangelista (2004-2010)Párroco de Nuestro Señor de los Cristales (2010-2017)Párroco de María Inmaculada (2017-2024)Vicario Episcopal de Economía (2024 hasta la fecha)