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Iglesia

Jue 23 Sep 2021

¿Estás celoso de mí? ¡Ojalá todo el pueblo fuera profeta!

VIGESIMOSEXTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO Septiembre 26 de 2020 Primera lectura: Nm 11,25-29 Salmo: Sal 19(18),8.10.12-13.14 (R. cf. Sab 1,7) Segunda lectura: St 5,1-6 Evangelio: Mc 9,38-43.45.47-48 I. Orientaciones para la Predicación Introducción El tema de los profetas, asociado a sus funciones en la sociedad veterotestamentaria, es abundante en la comprensión de la manera en que Dios se manifiesta, pero ante todo, se comunica con su pueblo. La profecía está muy asociada al destino de creyente y aunque en la fe judía estaba muy asociada a una profesión virtuosa, con honorarios, y funciones sociales fundamentales para la vida religiosa y espiritual; ya en el nuevo Testamento las alusiones a la «Ley y los profetas» tendrá un significado vinculado con la revelación del antiguo Testamento. Las lecturas de este domingo son un llamado a buscar cómo orientar el camino la vida y, desde allí, sembrar una preocupación por hacer que la vida se llene de lo esencial. 1. Lectio: ¿Qué dice la Sagrada Escritura? La figura de Moisés es para el contexto de la fe y religión judeocristianas una de las figuras más emblemáticas. Legislador, liberador, jefe de la tribu, pero, ante todo, Moisés es un gran profeta del antiguo Testamento que responde a la vocación a la que Dios lo ha destinado. El pasaje del libro de los Números reitera la relación cercana que tenía Moisés con el Dios de Israel, la amistad es una expresión propia de fidelidad del ser humano a Dios. Moisés tiene la certeza de la importancia de sentirse elegido como líder liberador, caudillo, legislador y profeta, porque el Señor siempre estaba a su lado. La carta de Santiago es un conjunto de relatos en los que se van desplegando diversas acciones para vivir con fidelidad el ser cristiano. El texto de la liturgia de este domingo hace parte de ese conjunto de acciones que hacen del creyente un ser dispuesto a la voluntad del Señor. Por ello las advertencias a vivir una fe por medio de las obras como la justicia, la honestidad, el respeto por los más débiles y ante todo procurar una vida en Cristo consiste en no sucumbir a los tesoros de la tierra, puesto que son pasajeros y se corroen con la avaricia del poder y la malversación de recursos. El evangelio de Marcos contiene dos grandes partes de recomendaciones para la comunidad apostólica. La primera de ellas se centra en el fundamento de la fidelidad al maestro; ya no son solo los doce quienes están ejerciendo el ministerio de la palabra, puesto que el discipulado se expandía de manera rápida. Por ello Jesús interpela a sus más cercanos seguidores a acoger a los nuevos evangelizadores, puesto que no se obran los gestos realizados en su nombre si no tienen las mismas intenciones. En una segunda parte del texto la comunidad aprenderá a vivir bajo la mirada, los pasos y las obras en nombre de su Señor. La perícopa termina con una interpelación centrada en el cuidado del creyente de su vida en servicio al Reino de Dios. 2. Meditatio: ¿Qué me dice la Sagrada Escritura y que me sugiere para decirle a la comunidad? Todo aquel que vive su vocación asume una manera de relacionarse con Dios. La forma de constatar la vigencia del llamado es por las obras, estás le dan legitimidad a la respuesta que se le da al Señor. Moisés, los apóstoles y la comunidad cristiana a la que le habla el apóstol Santiago, saben de las implicaciones de vivir a plenitud la vocación. De tal forma que, los cuatro propósitos de cambio para los creyentes presentados, por Marcos, en el evangelio son una ruta espiritual de vivir bajo las condiciones propias de esperar la experiencia del Reino de Dios presente en la comunidad. Puesto que toda acción conducente al pecado debe ser erradicada de la comunidad para evitar la pérdida de una vivencia auténtica del Reino. Es así como cuatro causas concretas de pecado se convierten en oportunidades de vivir el evangelio. El primer motivo conducente al pecado es el escándalo, aquellos que con sus comportamientos se convierten en generadores de malas conductas, deben revisar sus intenciones reales para vivir en la coherencia. Lo más lejano al escándalo es la capacidad de hacer vida las palabras por medio de las obras. El segundo motivo conducente al pecado está representado en las manos, es decir las obras. Por tanto, toda obra que esté en contra del amor debe ser erradicada de la vida para que no afecte a la comunidad. Las obras dedicadas a cosechar con los actos discordia, división, escándalo e injusticia deben ser erradicadas porque están orientadas al pecado. Un tercer motivo de pecado, en el texto, se simboliza por medio de los pies. De tal manera que quien no es consciente del camino que lo está llevando a vivir una vida plena en Dios, seguramente va por el camino equivocado. La experiencia cristiana es un camino, que tiene como mediación la vivencia de la cruz. Este evangelio está antecedido de la narración de la transfiguración, en la cual el discípulo está llamado a bajar de la montaña para disponerse a subir a Jerusalén. Renunciar a los caminos que alejan al creyente de vivir bajo de insignia gloriosa de la cruz, es renunciar a cortar de raíz los caminos conducentes al pecado. El cuarto motivo conducente al pecado está representado en el ojo, es decir, en la mirada. De tal modo que la sentencia “[…] y si tu ojo es ocasión de pecado”, le indica al discípulo que no puede alejar, ni quitar, su mirada del reconocimiento de la presencia de Dios en su vida, en las personas y en el contexto. Finalmente, las cuatro representaciones del pecado presentes en el evangelio simbolizadas por las obras, las manos, los pies y el ojo, son alusiones directas a las conductas que llevan a vivir una vida plena en el espíritu en donde las obras, caminos y formas de ver la presencia de Dios, son modos de santificación en la vida. 3. Oratio y Contemplatio: ¿Qué suplicamos al Señor para vivir con mayor compromiso la misión? ¿Cómo reflejo en la vida este encuentro con Cristo? El camino a la santidad, en la vida cristiana, es un itinerario constante de aprendizaje sobre las maneras en qué Dios se revela en la vida de quien lo decide seguir. En palabras del papa Francisco refiriéndose a los santos de la puerta de al lado acota que: “Me gusta ver la santidad en el pueblo de Dios paciente: a los padres que crían con tanto amor a sus hijos, en esos hombres y mujeres que trabajan para llevar el pan a su casa, en los enfermos, en las religiosas ancianas que siguen sonriendo. En esta constancia para seguir adelante día a día, veo la santidad de la Iglesia militante. Esa es muchas veces la santidad «de la puerta de al lado», de aquellos que viven cerca de nosotros y son un reflejo de la presencia de Dios, o, para usar otra expresión, «la clase media de la santidad»” (Gaudete-et-exsultate, 7). II. Moniciones y Oración Universal o de los Fieles Monición introductoria de la Misa La celebración de la eucaristía cada domingo, es una oportunidad para salir renovados en el Espíritu. Hoy estamos llamados a descubrir cómo en la vida cristiana son muchos los que han dado una respuesta afirmativa a la vocación recibida. Vivir en comunidad la eucaristía es reconocer que somos muchos los llamados a vivir esa dimensión profética recibida en el bautismo. Abramos nuestra mente y corazón a recibir el mensaje de la Palabra y el banquete de la eucaristía como un signo propio de los senderos, las obras, y las miradas que debemos cambiar para recibir con amor todo lo que nos viene de Dios. Bienvenidos a esta celebración dominical. Monición a la Liturgia de la Palabra Las lecturas de la liturgia de este domingo tienen en la figura de Moisés, el reconocimiento de ese hombre, llamado por Dios a profetizar en su pueblo el mensaje de la liberación no exclusiva ni excluyente. Del mismo modo escucharemos cómo Santiago, en su carta, reconviene a su comunidad para que no obren de manera injusta y busquen la riqueza de los bienes espirituales, más allá de los gananciales materiales. Así, encontraremos en el evangelio el testimonio de los apóstoles que están llamados a no ser los únicos en el anuncio. Escuchemos con el corazón abierto el mensaje de la Palabra de Dios. Oración Universal o de los Fieles Presidente: Oremos juntos en comunidad al Señor, para que el mensaje de su palabra se convierta en obras que nos lleven a la santidad, y supliquémosle a nuestro Padre amoroso, para que escuche nuestras intenciones diciendo: R. Escucha, Padre de amor, nuestra oración 1. Oremos juntos por la Iglesia, para que en medio de las pruebas encuentre un camino de purificación, y así, crezca su compromiso en la promoción humana de todos los que buscan servir al Señor, oremos. 2. Oremos juntos por el Papa y sus ministros, para que el don de la profecía los lleve a orientar, con los dones del Espíritu Santo, a la Iglesia a una vida alejada de todo aquello que no es propio de la búsqueda de santidad, oremos. 3. Oremos juntos por los gobernantes, para que su conducta sea siempre un espacio en donde se privilegie la construcción del bien común y la consecución de una paz estable y duradera, oremos. 4. Oremos juntos por nuestra comunidad, para que se privilegie la vivencia de una vida llena del amor como el reconocimiento de la presencia de Dios en todos y en todo, oremos. 5. Oremos juntos por los más necesitados de nuestra sociedad, para que entre todos privilegiemos la fraternidad y la solidaridad, como valores propios del respeto, por el ser humano que Dios ha creado digno por su amor, oremos. Se pueden añadir otras intenciones personales... Oración conclusiva Padre de misericordia, recibe nuestras humildes plegarias pues confiamos en que escuchas nuestra voz suplicante. Por Jesucristo nuestro Señor. R. Amén.

Mié 22 Sep 2021

Por una Iglesia sinodal

Por: Mons. Juan Carlos Cárdenas - ¿Qué nos propone el Papa Francisco? - Recientemente se han dado a conocer oficialmente los documentos con los que, por voluntad del Papa Francisco, la Iglesia es convocada a un proceso sinodal que tendrá su momento culminante en Octubre de 2023. Pero, ¿qué es lo que esto significa e implica para la Iglesia? Comencemos por entender el significado de la palabra sínodo; esta viene del griego y está compuesta de dos términos sin (reunión, acción conjunta) y odos (ruta, camino, viaje). De este modo, sínodo se entiende como hacer camino juntos. La temática del sínodo que convoca el Santo Padre, en esta ocasión tiene la particularidad de convocar a la Iglesia ha reflexionar sobre su profunda vocación de ser pueblo de Dios en el que nadie sobra ni tiene por qué sentirse excluido. Escuchar y escucharnos El tema mismo: “Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión” tendrá la novedad de activar este proceso desde cada una de las diócesis del mundo. Allí, el Papa quiere que empecemos por escucharnos y escuchar a los más posibles, haciendo así concreta su llamada a ser Iglesia en salida, que va a las periferias existenciales. Ir a la esencia El Papa Francisco no está inventando algo que no esté en el corazón mismo de la identidad de la Iglesia; nos está llamando a enfocarnos en la naturaleza de la Iglesia como comunidad, es decir, congregación de hombres y mujeres que, siendo todos igualmente hijos e hijas de Dios, hacemos camino juntos, buscando el mismo fin: hacer presente el Reino de Dios en el mundo hasta el encuentro definitivo con el Señor. Tal vez con el paso de los siglos, a la Iglesia se la ha visto más como una institución casi comparable con otro tipo de instituciones, movidas por lógicas y relaciones jerárquicas o de poder. Pero lo cierto es que nada está más lejos de esto: En su vida pública Jesús fue congregando alrededor suyo un grupo de personas para hacer camino con Él y asumir un estilo de vida en la cual todos contaban y se apoyaban unos a otros. Los mismos Hechos de los apóstoles relatan de las primeras comunidades que «se reunían en un mismo lugar y tenían todo en común» (2, 44). Así, la Iglesia es la comunidad de los bautizados, discípulos de Jesucristo, que asumimos como estilo de vida, caminar juntos tras las huellas del maestro, y a pesar de tener roles distintos, lo central que es la consciencia de ser hermanos. En oración Desde ya, pidamos al Espíritu Santo que acompañe este proceso sinodal convocado por el Santo Padre, para ajustarnos más fielmente a la comunidad que Dios quiere que seamos. + Juan Carlos Cárdenas Toro Obispo Diócesis de Pasto

Mié 22 Sep 2021

Como un crimen cataloga Iglesia el flagelo de explotación sexual y trata de personas

En el marco de la conmemoración del Día Internacional contra la explotación sexual y el tráfico de mujeres, niños y niñas, que se celebra este 23 de septiembre, monseñor Héctor Fabio Henao Gaviria, director del Secretariado Nacional de Pastoral Social (SNPS), advirtió que este flagelo que afecta a la humanidad va en crecimiento a lo largo de las décadas. Recordó además, que la trata de personas y la explotación sexual son dos fenómenos que están estrechamente relacionados y se presentan en muchos lugares del mundo, afectando a personas de todas las edades, pero principalmente a los menores que en situaciones de vulnerabilidad, pobreza extrema o exclusión, sienten necesidad de recurrir a distintas fuentes de ingreso. “Estas personas en condición de vulnerabilidad son fácilmente capturadas por personas que con intenciones oscuras los inducen por este camino y trafican con ellos como si fueran objetos para el intercambio, para el negocio y para el comercio”, aseguró Monseñor Henao Gaviria dijo que, como Conferencia Episcopal se ha alzado varias veces la voz para llamar la atención contra esta actividad ilegal, “que es un verdadero crimen que afecta a la humanidad y que destruye la vida social, el proyecto de vida de niños jóvenes y aún personas adultas que son víctimas de estas cadenas que generan tanta destrucción en el mundo”. Observó, como a través de la red CLAMOR, de la cual hacen parte la CEC, congregaciones religiosas, movimientos de laicos y distintas organizaciones de iglesia, se sigue enfocando la atención en la labor de acompañamiento a las víctimas y en la búsqueda de salidas que ayuden a combatir este flagelo. Finalmente, el directivo hizo un llamado a la sensibilización y la prevención de este fenómeno, mediante acciones tales como: Mayor información por parte de las autoridades competentes, a través de las redes comunitarias, desde el hogar, en los grupos a que pertenezcamos y en las parroquias, solo así dijo el directivo “podremos ayudar a crear ambientes seguros, para que las personas no sean víctimas de esta actividad criminal que hoy hace tanto mal al mundo y a nuestra juventud”.

Mié 22 Sep 2021

Manual de celebraciones para la apertura del proceso sinodal 2021 - 2023

El próximo 17 de octubre la Iglesia Católica en Colombia, en comunión con el Papa Francisco, vivirá un acontecimiento eclesial que marca un hito en la historia de la Iglesia, se trata de la apertura del sínodo en las Iglesias locales y otras realidades eclesiales. Para vivir este acontecimiento puntual, la Santa Sede propone dos encuentros: “Un momento de encuentro/reflexión y un momento de oración/celebración”, frente a ello, la Comisión del Secretariado Permanente del Episcopado Colombiano (SPEC) para la Espiritualidad del proceso sinodal, propone algunas pautas metodológicas y un subsidio celebrativo, que bien puede ser enriquecido por cada Iglesia local. Este subsidio estará disponible en el sitio web de la Conferencia Episcopal de Colombia [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar AQUÍ[/icon] Sínodo 2021 - 2023 Fue el pasado mes de mayo cuando se hizo público el itinerario sinodal aprobado por el Papa Francisco para la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, que debe tener lugar en octubre de 2023 con el lema: 'Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión'. Con esta convocatoria, el Pontífice “invita a toda la Iglesia a interrogarse sobre la sinodalidad: un tema decisivo para la vida y la misión de la Iglesia”. De ahí, la comunión con el obispo de Roma para que en todas las diócesis del mundo se dé inicio a un itinerario al Sínodo, que arranca el 17 de octubre y concluye en el mes de octubre de 2023. Se trata de actividades orientadas a ayudar a entender y vivir la sinodalidad en la Iglesia. Son cuatro las fases contempladas como itinerario: diocesana y nacional entre 2021 y 2022, y continental y mundial entre 2022 y 2023 para concluir en octubre de este último año en Roma con la XVI Asamblea Ordinaria del Sínodo de los Obispos. Visita [icon class='fa fa-download fa-2x']AQUÍ[/icon]el sitio oficial del Sínodo 2021-2023

Mar 21 Sep 2021

Comunidades misioneras celebran la VI Semana Miguel Ángel Builes

Al conmemorarse los 50 años de fallecimiento del siervo de Dios, Miguel Ángel Builes, quien fuera obispo de la Diócesis de Santa Rosa de Osos en el año 1924, esta Iglesia particular presidida por monseñor Elkin Álvarez Botero, celebrará entre el 22 y 29 de septiembre la VI Semana MAB. A este acontecimiento se une también la Comisión Episcopal de Misiones, integrada por el Centro de Animación Misionera de la Conferencia Episcopal de Colombia, las Obras Misionales Pontificias, el Instituto Misionero de Antropología y la Fundación Colombiana para las Misiones, quienes ligan este importante hecho con la conmemoración de los 100 años del primer Congreso Nacional Misionero. Será una semana para resaltar la vida de este misionero fallecido el 29 de septiembre de 1971y quien recorrió las calles de Antioquia y del país evangelizando a través de sus obras. La consagración episcopal de Miguel Ángel Builes, como obispo de la Diócesis de Santa Rosa de Osos, que se dio en la ciudad de Bogotá el 29 de junio de 1927, coincidió con la fecha en que se realizaba el primer Congreso Nacional Misionero. Es importante destacar que monseñor Builes es reconocido en la Iglesia colombiana como el “obispo misionero de Colombia”, pues se distinguió por su destacado espíritu misionero que infundió en todas sus obras, desde la incansable acción pastoral y misionera en su diócesis, que en su tiempo era una de las de mayor extensión en Colombia, hasta su proyección en muchas regiones del país y del mundo a través de las Congregaciones que él fundo. Cabe resaltar, que cada día de la agenda de esta semana, estará marcada por momentos especiales: panel, conferencias, catequesis, cantos y celebraciones litúrgicas, donde participarán niños, jóvenes, adultos, sacerdotes, religiosas, religiosos, seminaristas, quienes han visto en la obra de este misionero su ejemplo a seguir. Como cierre de esta celebración, el miércoles 29 de septiembre, a las 10:30 a.m. monseñor Álvarez Botero presidirá la eucaristía de clausura. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar AGENDA[/icon] MONSEÑOR MIGUEL ÁNGEL BUILES GÓMEZ 1924 – 1971 Nació en Donmatías el 19 de septiembre de 1888. Ordenación Sacerdotal: el 29 de septiembre de 1914 por Monseñor Maximiliano Crespo. Fue vicario parroquial de Valdivia y misionero del Bajo Cauca; luego párroco de El Tigre, Santa Isabel, Tierradentro (Aragón) y de Remedios. Ordenación Episcopal: el 3 de agosto de 1924. En Santa Rosa de Osos, l 3 de julio de 1927 fundó el Seminario de Misiones de Yarumal; el 11 de abril de 1929, la congregación de las Hermanas Misioneras Teresitas y el 11 de octubre de 1951, la congregación de las Hijas de Nuestra Señora de las Misericordias. Verificó innumerables ordenaciones sacerdotales. Creó 23 parroquias: la Inmaculada y las Misericordias de Caucasia, el Aro, el Carmen de la Venta, el Oro, Horizontes, la Granja, Los Llanos, Llanadas, Margento, Puerto Valdivia, Santa Isabel, San Diego, La Honda, San Isidro, San Matías, Santa Ana, Labores, El Tigre, Ochalí, Tamaná, La Inmaculada de Yarumal, Vegachí. Recorrió la diócesis, por siete y hasta ocho veces, dejando en cada parroquia actas de visitas, que son verdaderos tesoros para la historia de la Iglesia diocesana. Construyó los edificios de la Curia, del Seminario y de la Basílica Menor de Nuestra Señora de las Misericordias. Creo el Mutuo Auxilio del Clero y el Fondo de Solidaridad Sacerdotal. Gobernó la diócesis celosamente, durante casi cuarenta y tres años. El 15 de febrero de 1965 presentó al Sumo Pontífice Pablo VI, renuncia de su cargo, y le fue aceptada el 22 de abril del mismo año; Conservó el título de Obispo titular hasta el 29 de septiembre de 1971. El 29 de septiembre de 2001 se inició el proceso de beatificación y canonización, diligencia que marcha satisfactoriamente, en la actualidad es Venerable en espera de un milagro para que sea declarado como Beato.

Mar 21 Sep 2021

Bitácora del Encuentro Nacional de Directores de pastoral Social

EL 18 Y 19 se septiembre el Secretariado Nacional de Pastoral Social –Cáritas Colombiana (SNPS-CC) y la Diócesis de Tumaco, en el marco de la celebración de la 34a. Semana Por la Paz y la conmemoración de los 20 años del asesinato de la Hermana Yolanda Cerón, realizaron el Encuentro Nacional de Directores y Directoras de Pastoral Social de Colombia bajo el lema, “La cultura del encuentro” en el municipio de Tumaco-Nariño. En este espacio se desarrollaron varias actividades donde se recordó y conmemoró a la hermana Yolanda Cerón veinte años después de su asesinato, resaltando su legado entre líderes y lideresas de las comunidades afrodescendientes con las que trabajó en la defensa del territorio. En esta congregación se realizó la Santa Eucaristía; con la entrega de una estatuilla se brindó un homenaje a la familia de la hermana Yolanda Cerón; y finalmente se hizo la presentación del libro en memoria de la religiosa: “La Hermana del Pacifico”.

Lun 20 Sep 2021

XVII Congreso Nacional de Educación Católica

Con el tema: "La escuela católica, escenario pedagógico para promover la amistad social", la Confederación Nacional Católica de Educación, CONACED, realizará los días 23, 24, 29 septiembre y 6 de octubre, en el horario de 3:00 a 6: p.m. el XVII Congreso Nacional de Educación Católica. Según lo describen sus organizadores este Congreso plantea como objetivo: “Valorar y proyectar los diferentes escenarios pedagógicos que la escuela católica, iluminada por Jesús Maestro, lidera para promover la amistad social desde el fortalecimiento de las relaciones entre los actores educativos y la promoción del ser humano”. Será un espacio dirigido a: Líderes educativos de comunidades religiosas y diocesanas; rectores, directivos y docentes de todas las áreas; coordinadores de educación de las comunidades religiosas y diocesanas. Ponentes La realización del Congreso cuenta con la participación de expertos en educación del ámbito nacional e internacional, quienes se unirán a través de plataformas digitales, “para proponer el reconocimiento de escenarios pedagógicos que la escuela católica tiene y puede proponer para promover la amistad social”. Son ellos: Mons. Angelo Vicenzo, secretario de la Congregación para la Educación Católica en el Vaticano, Dr. Luis Fernández, Decano de Teología, Filosofía y Humanidades de la Pontificia Universidad Bolivariana (Medellín); Ismael Pantaleón, Director de Ideas Infinitas, innovación estratégica en España; Mag. Ana Milena Dávina, docente y líder de proyectos educativos en psicopedagogía educación inclusiva (colombiana); Lc. Mónica Rodríguez, licenciada en Dirección de Recursos Humanos, Universidad Belgrado; y la hermana Montserrat del Pozo, religiosa española, superiora General Congregación Hijas de la Sagrada Familia de Nazaret, pionera en la apliación en el aula de la Teoría de las Inteligencias Múltiples de Howard Gardner. Conozca más detalles agenda y costos del Congreso en el siguiente enlace. [icon class='fa fa-download fa-2x'] AQUÍ[/icon] Formulario de inscripción [icon class='fa fa-download fa-2x'] AQUÍ[/icon]

Lun 20 Sep 2021

Conozcamos a Jesús en la Sagrada Escritura

Por: Mons. José Libardo Garcés Monsalve - Cada año, durante el mes de septiembre se ha hecho un gran esfuerzo por reflexionar sobre la Palabra de Dios, buscando que los fieles tengan un profundo conocimiento de Nuestro Señor Je­sucristo y puedan orientar sus vidas con las enseñanzas contenidas en la Sagrada Escritura, respondiendo con ello a las propuestas que a lo largo de la historia se han hecho para avanzar en el conocimiento de la Palabra de Dios. Aparecida ha reforzado esta tarea cuando afirma: “Encontramos a Jesús en la Sagrada Escritura, leí­da en la Iglesia, la Sagrada Escri­tura, ‘Palabra de Dios escrita por inspiración del Espíritu Santo’, es con la tradición, fuente de vida para la Iglesia y alma de su acción evan­gelizadora. Desconocer la Escritura es desconocer a Jesucristo y renun­ciar a anunciarlo” (DA 247). Se hace necesario seguir profundi­zando en el conocimiento de Jesu­cristo como Verdad suprema que nos conduce por los caminos del bien. La Palabra de Dios es la Verdad sobre la cual podemos fundamen­tar nuestras vidas, con la máxima seguridad, que vamos por el mejor de los caminos. En esa Palabra se habla de Jesucristo como “el Cami­no, la Verdad y la Vida” (Jn 14, 6), y de todo el bien que hace en nosotros cuando la escuchamos atentamente y la ponemos en práctica. El Plan Pastoral de nuestra Dióce­sis de Cúcuta, tiene como prioridad conocer y amar a Jesucristo que es nuestra esperanza, centrando todo el contenido de la reflexión en la Palabra de Dios, con el objetivo de formar a los miembros de las comu­nidades eclesiales misioneras en el conocimiento del Señor Jesús; tal como lo pide Aparecida: “Sentimos la urgencia de desarrollar en nues­tras comunidades un proceso de ini­ciación en la vida cristiana que co­mience por el kerygma, guiado por la Palabra de Dios, que conduzca a un encuentro personal, cada vez mayor, con Jesucristo, perfecto Dios y perfecto hombre, experimentado como plenitud de la humanidad, y que lleve a la conver­sión, al seguimiento en una comunidad eclesial y a una ma­duración de fe en la práctica de los sacra­mentos, el servicio y la misión” (DA 289). Este proceso de con­versión a la luz de la Palabra de Dios, nos prepara para la celebración de la Eucaristía y para el ejercicio de la caridad, que requieren precisamen­te una transformación de la vida en Cristo, como meta de un proceso de conversión que se va fortaleciendo cada día con la escucha de la Palabra y la frecuencia de los sacramentos, sobre todo la Eucaristía, fuente y culmen de la vida cristiana (Cf. LG 11), en donde se sirven el pan de la Palabra y el pan de la Eucaristía; tal como lo enseña el Concilio Vaticano II: “La Iglesia ha venerado siempre la Sagrada Escritura al igual que el mismo Cuerpo del Señor, no dejando de tomar de la mesa y de distribuir a los fieles el pan de vida, tanto de la Palabra de Dios como del Cuerpo de Cristo, sobre todo en la liturgia” (DV 21). La Palabra de Dios y la Eucaristía van sembrando en el creyente las se­millas del Reino de Dios, las cuales le permite llenarse de fervor pastoral, para luego comunicarlo con la vida y las palabras, en un deseo sincero de evangelizar, llevando el mensaje de la salvación a muchas personas. Un deseo evangelizador que brota del conocimiento y el amor por la persona, el mensaje y la Palabra de Nuestro Señor Jesucristo. Así lo en­seña el Papa Francisco cuando afir­ma: “La Palabra de Dios escuchada y celebrada, sobre todo en la Euca­ristía, alimenta y refuerza interior­mente a los cristianos y los vuelve capaces de un auténtico testimonio evangélico en la vida cotidiana. La Palabra proclamada, viva y efi­caz, prepara para la re­cepción del Sacramen­to, y en el Sacramento esa Palabra alcanza su máxima eficacia” (EG 174). Un evangelizador es capaz de ponerse en actitud orante en torno a la Palabra de Dios, bro­tando de allí el deseo de comunicar a Jesús, cumpliendo con el mandato misionero del Señor de ir por todas partes a hacer discípulos del Señor (Cf. Mt 28, 19); comunicando el mensaje a través de la caridad, como fruto maduro de todo el proceso de iniciación cristiana, de recibir la fe como don de Dios y compartirla con los hermanos. Es por esta razón que la Iglesia siempre nos ha llamado a fortalecer la fe, mediante el cono­cimiento y la vivencia de la Sagra­da Escritura. Así lo expresa el Papa Francisco: “El estudio de las Sagra­das Escrituras debe ser una puerta abierta a todos los creyentes. Es fun­damental que la Palabra revelada fecunde radicalmente la catequesis y todos los esfuerzos por transmitir la fe. La evangelización requiere la familiaridad con la Palabra de Dios y esto exige a las diócesis, parro­quias y a todas las agrupaciones ca­tólicas, proponer un estudio serio y perseverante de la Biblia, así como proponer su lectura orante, perso­nal y comunitaria” (EG 175). Un cristiano que profundice en la Sagrada Escritura y se alimente de ella en la oración diaria, tendrá con­tenido para comunicar a los herma­nos, mediante una vida coherente con el Evangelio y con sus palabras que resuenan como anuncio del Reino de Dios, en el corazón de muchos creyentes. Eso constitu­ye una siembra del Reino de Dios, que en el proceso evangelizador de la Iglesia corresponde a la acción misionera y a la catequesis, que pue­de hacer todo creyente que se siente interpelado por la Palabra de Dios y que siente en su corazón el deseo de comunicarla, primero en el ambiente del hogar, y luego en los lugares en los que Dios nos pone, para dar testi­monio de Él, entregando cada día la vida al Señor. Los convoco a poner la vida perso­nal y familiar bajo la guía de la Pa­labra de Dios, que escruta nuestros corazones y nos permite renovar la vida interior; hasta el punto de con­vertir nuestra vida en Cristo, para decir, ya no soy yo quien vivo es Cristo quien vive en mi (Cf. Gal 2, 20), porque realmente es el centro de nuestra existencia y punto de apoyo en nuestras decisiones. Para todos, mi oración y mi bendición. + José Libardo Garcés Monsalve Obispo Diócesis de Málaga Administrador Apostólico de la Diócesis de Cúcuta