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Iglesia

Mié 8 Nov 2017

Iglesia ofrece cursos de español para migrantes

El Programa de Refugiados liderado por el Secretariado Nacional de Pastoral Social, logró un importante acuerdo con el Instituto Caro y Cuervo para que los solicitantes de asilo y refugiados extracontinentales que no hablan español, se beneficien de cursos gratuitos para aprender este idioma, dictados por estudiantes de la maestría en pedagogía de la enseñanza en español. El pasado miércoles 1 de noviembre se llevó a cabo la reunión inicial con todos los beneficiarios, personas provenientes de Turquía, Afganistán, Irán y Siria. Allí se hizo una presentación por parte de la directora de la maestría de pedagogía de enseñanza del idioma español, así como de la Directora del Instituto. En la misma se decidió crear 7 grupos de aprendizaje, de acuerdo a niveles y edades, estos cursos darán inicio el próximo 14 de noviembre. Estos cursos antes solo podían ser ofertados a refugiados con situación migrante definida y tenían un alto costo. Ahora serán gratuitos, y podrán participar también las personas que son solicitantes de asilo, lo que contribuirá a la integración más rápida de los migrantes que están llegando a territorio colombiano.

Sáb 4 Nov 2017

Siempre listos para servir

Por: Mons. Omar de Jesús Mejía Giraldo - La familia es la fuente del más rico humanismo. Es en la familia donde se aprende a amar, es en la familia donde se aprende la fraternidad y es en la familia donde se aprende a servir. Recuerdo con cariño la infancia vivida al lado de mis padres y hermanos. Cuando alguien llegaba a mi casa, mis padres se desvivían por atenderlo bien y por prestar el servicio que solicitaba. Además de mi familia hoy valoro con gratitud al movimiento Scout, donde reforcé los principios aprendidos en el hogar. En el escultismo me enseñaron el siguiente lema: “siempre listo para servir”. Servir es fuente de alegría y gozo. Servir enriquece y da plenitud al ser humano. Servir sin esperar recompensa genera amigos y da confianza a los demás. La conclusión final del evangelio de hoy es: “El primero entre ustedes sea su servidor.” El evangelio comienza diciendo que Jesús se dirige a la gente y a sus discípulos recordándoles que en la cátedra de Moisés se han sentado los letrados y fariseos. No se nos olvide que se trata de los dirigentes del pueblo, ellos son las autoridades religiosas, civiles y académicas. Son a su vez, quienes crean las leyes, establecen las normas de comportamiento y dan las directrices de comportamiento en al sociedad; sin embargo, son ellos mismos, quienes violan en primera instancia las leyes. Son ellos los primeros que no están dispuestos a asumir las responsabilidades para las cuales han creado leyes que salen de sus propias entrañas. Con esto el evangelio nos está diciendo que no bastan las leyes, no son suficiente los reglamentos y las normas; será siempre necesario la renovación de la mente y el corazón. “Hagan y cumplan lo que ellos digan; pero no hagan lo que ellos hacen, porque ellos no hacen lo que dicen.” Amar es cumplir la ley entera, por eso, cuando se multiplican las leyes se va perdiendo el amor. Siempre será necesario que hayan personas que piensen leyes, pero, quien piensa una ley debería ser el primero en cumplirla. La enseñanza de Jesús es simple: : “El primero entre ustedes sea su servidor.” La meta es servir, servir, servir; por eso, cuanto más se avanza en responsabilidad, más simple debe ser la vida. El poder es para servir. No se puede concebir un cristiano que no sirva y mucho menos comprensible es ver un servidor público que no sirve, si se llama servidor público es porque su pasión es servir. ¿Qué pasa en el corazón de un servidor público, que lucha tanto por ser servidor público y luego no quiere servir? Sin espíritu de servicio el “servicio público” se vuelve tedioso, aburridor y angustioso. El servicio es una vocación y no simplemente una profesión. Cuando alguien piensa en ser servidor público debería prepararse con alma vida y corazón, para serlo de verdad y con pasión y no simplemente por dinero. “El primero entre ustedes sea su servidor.” A veces, cuanto más alguien sube de estrato, más se olvida de los de abajo, debería ser lo contrario, cuanto más se avanza, más compasión, más misericordia, más cercanía, más amabilidad, más servicio. El Papa Francisco con la autoridad de ser el mayor entre nosotros nos dice al respecto sobre el servicio: “Para ser capaces del servicio, se necesita la salud del corazón: un corazón restaurado por Dios, que se sienta perdonado y no sea ni cerrado ni duro.” Ser maestro, jefe y padre, es signo de ser los mayores y si se es el mayor, se debe poseer una más grande capacidad de servicio. Jesús se inventó el sacerdocio, para que fuéramos los servidores e intermediarios entre Dios y los hombres. Cualquier vocación o profesión posee finalmente el objetivo del servicio. Un maestro sirve para enseñar; un padre de familia sirve para educar a los hijos; un piloto para pilotear el avión y allí transportar a las personas; un servidor público para buscar el bien común… Pensemos cada uno: ¿Para qué sirvo yo? ¿En la iglesia y en la sociedad cuál es mi servicio? Quien no vive para servir, no sirve para vivir. Decir qua se ama a Dios, implica poner en práctica el servicio a Él y a los demás. El servicio es prestar asistencia a quienes necesitan ayuda. El servicio cristiano nace del amor genuino que se siente por el Salvador, y del amor y la preocupación por quienes Él no sólo nos da la oportunidad de ayudar, sino de guiar en la vida. El amor es más que un sentimiento; cuando amamos a los demás, deseamos ayudarlos. El servicio ensancha el corazón y nos hace más generosos. Cuando el servicio es realmente una virtud cristiana se hace para honrar a Dios a través del servicio al hermano y no para aparentar y ser felicitados. El evangelio critica precisamente a los fariseos, porque ellos lo único que buscaban era que fueran reconocidos y venerados como ilustres y no como servidores. “Les gustan los primeros puestos en los banquetes y los asientos de honor en las sinagogas; que les hagan reverencia por la calle y que la gente los llame maestro.” Dice Jesús: “El primero entre ustedes sea su servidor.” Nuestra tarea es servir sin esperar más recompensa que la de saber que se está haciendo la voluntad de Dios. Una invitación final: cuidado con las tentaciones que atacan con tanta frecuencia a quienes nos dedicamos al servicio: La pereza, el orgullo, la prepotencia, la avaricia. El diablo nos ataca por donde más débiles nos encuentra. Cuando un servidor no está unido al Señor a través de la Palabra, la oración y la vivencia de los sacramentos, termina cediendo a la tentación del poder con el mero afán de lucro personal y no en función del servicio buscando el bien común. La tarea del cristiano será siempre dar gloria y honra a Dios a través del servicio generoso y alegre a los demás. Servir, servir, servir, sin mirar y reparar a quien es nuestra tarea. Dios nos conceda la gracia de crecer todos los días en el don del servicio generoso y gratuito a los demás. + Omar de Jesús Mejía Giraldo Obispo de Florencia Mateo 23,1-12 En aquel tiempo, Jesús habló a la gente y a sus discípulos diciendo: En la cátedra de Moisés se han asentado los letrados y los fariseos: haced y cumplid lo que os digan; pero no hagáis lo que ellos hacen, porque ellos no hacen lo que dicen. Ellos lían fardos pesados e insoportables y se los cargan a la gente en los hombros; pero no están dispuestos a mover un dedo para empujar. Todo lo que hacen es para que los vea la gente: alargan las filacterias y ensanchan las franjas del manto; les gustan los primeros puestos en los banquetes y los asientos de honor en las sinagogas; que les hagan reverencia por la calle y que la gente los llame «maestro». Vosotros, en cambio, no os dejéis llamar maestro, porque uno solo es vuestro maestro y todos vosotros sois hermanos. Y no llaméis padre vuestro a nadie en la tierra, porque uno solo es vuestro padre, el del cielo. No os dejéis llamar jefes, porque uno solo es vuestro Señor, Cristo. El primero entre vosotros será vuestro servidor. El que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido. Tarea: Realizar una “buena acción” diaria; es decir, que no nos llegue la noche, sin haber realizado al menos, un servicio generoso y gratuito durante el día.

Vie 3 Nov 2017

Ecología con ética

Por: Mons. Ismael Rueda Sierra - Con sobrada razón, el Papa Francisco, sin dudas, se ha convertido en adalid de la defensa del medio ambiente. A partir de argumentos y convicciones con carga de profundidad, pues va más allá de cualquier interés ideológico, político o técnico, que no desconoce, ubica su llamado en una dimensión ética, respaldada en el humanismo cristiano, así como en una escala de valores que permite ubicar la cuestión ecológica en el lugar que corresponde, en cuanto favorable siempre a la dignidad humana y su desarrollo integral. Lo hace con humildad, sin querer “sentar cátedra” porque, como es su costumbre, escucha de buen grado, diferentes concepciones y enfoques en el manejo del medio ambiente, para llevar al discernimiento necesario en esta materia que cada vez toma mayor importancia en el mundo de hoy y que ya constituye fuente permanente de conflicto social y cultural. Su Carta Encíclica “Laudato Si” por su contenido sabio y pertinente, en una ruta que, para el honesto buscador de soluciones concretas a problemas de esta naturaleza, resulta ser luz para ver y criterio para actuar, en el momento de proponer o de tomar decisiones que afectan al medio ambiente sobre todo cuando se hace necesario conciliar lo técnico con lo ético. Este aporte del Santo Padre ayuda a crear una sólida cultura ecológica, pues de lo contrario, como él mismo lo manifiesta, ésta “no se puede reducir a una serie de respuestas urgentes y parciales a los problemas que van apareciendo en torno a la degradación del ambiente, el agotamiento de las reservas naturales y a la contaminación”. Y ella debe tomar la forma de “una mirada distinta, un pensamiento, una política, un programa educativo, un estilo de vida y una espiritualidad que conformen una resistencia ante el avance del paradigma tecnocrático” (cf. L.S. #111). Basta fijarnos en el capítulo tercero de la encíclica, donde plantea la raíz humana de la crisis ecológica actual, más allá de los síntomas en los que se manifiesta, para concentrarse, como Él lo sugiere, en el modelo tecnocrático predominante y en el puesto que ocupa la persona humana y su acción en el mundo. Este ejercicio no desconoce los avances tecnológicos y científicos que han abierto enormes posibilidades en favor de la humanidad, en la medida en que éstos son producto de la creatividad humana, regalo de Dios, los cuales, bien aplicados, han contribuido a entregar alternativas favorables para un desarrollo sostenible. Pero el problema se sitúa en el mal uso de la libertad, utilizando el poder cada vez más creciente, con la ausencia de una ética sólida y una espiritualidad que regulen el recto ejercicio de decisiones que favorezcan la dignidad y el bien integral de las personas, con detrimento especialmente de los pobres y excluidos, que al final son quienes más sufren las consecuencias. Concluimos, de esta reflexión, que la ética debe predominar sobre la técnica a la hora de resolver los problemas que se derivan de la intervención en el medio ambiente, llámese de carácter minero, forestal, de expansión urbana o de cualquier otra índole. Sin olvidar que el agua es parte integrante del derecho a la vida. + Ismael Rueda Sierra Arzobispo de Bucaramanga

Vie 3 Nov 2017

Guiados por el Papa, iglesia colombiana proyecta su tarea misionera

El secretario general del episcopado, monseñor Elkin Álvarez Botero, informó que los obispos lanzarán una proyección pastoral misionera que apoye el trabajo en todas las jurisdicciones del país, iluminados por el mensaje que el Santo Padre dejó a los colombianos, “Pensamos en la realidad actual del país y lo que necesita, por ello iluminados por el Papa tenemos la gran responsabilidad de responder a los desafíos de este momento y a las problemáticas que resurgen en la vida nacional y que preocupan al episcopado colombiano”, afirmó el prelado El también obispo auxiliar de Medellín, dijo que haciendo énfasis en cada uno de los mensajes del Papa, los obispos estudiaron en detalle cada discurso que brinda las luces para los procesos que ha de seguir la Iglesia.

Jue 26 Oct 2017

Episcopado manifiesta preocupación sobre eutanasia en menores de edad

Ante la reciente decisión de la Corte Constitucional refiriéndose a la eutanasia aplicada para menores de edad, la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) manifestó su preocupación y aseguró que este acto es “una grave violación a la dignidad de la persona”. “Encontramos que el propósito de la reglamentación ordenada por la Corte va en contra vía del principio constitucional de defensa de la vida (artículo 11) y abre las puertas para que la sociedad llegue a legitimar la supresión de algunas personas y la negación de los más débiles y necesitados”, afirman los obispos colombianos en comunicado de prensa emitido en la tarde de hoy y firmado por el presidente del Episcopado Colombiano y Arzobispo de Villavicencio, monseñor Óscar Urbina; el vicepresidente de la CEC y Arzobispo de Medellín, monseñor Ricardo Tobón, y el Secretario General de este organismo y Obispo auxiliar de Medellín, monseñor Elkin Álvarez. Los obispos en su mensaje piden: Profundizar en la vida como el don más grande y maravilloso de Dios, dirigir más esfuerzos a la prestación digna, eficaz y humanizante de los servicios de salud, y multiplicar las acciones para acompañar y aliviar los sufrimientos de los enfermos. Finalmente hacen un llamado a los legisladores y profesionales de la salud, para que recuerden la invitación del Papa Francisco para que asuman “decisiones valientes y contra corriente” en defensa de la vida, especialmente la de los más pobres y débiles. [icon class='fa fa-download fa-2x'] Descargar comunicado[/icon]

Jue 26 Oct 2017

Comité Diocesano del valle acompañará verificación del cese el fuego con ELN

Con el fin de acompañar el Mecanismo de Veeduría y Verificación Técnica (MV&V) del Cese al Fuego Bilateral y Nacional entre el Gobierno Nacional y ELN, Iglesia en el Valle instaló este miércoles el primer Comité Diocesano, que será uno de los veinte comités que funcionarán por parte de la Iglesia en el país Durante una rueda de prensa el arzobispo de Cali, monseñor Darío de Jesús Monsalve, explicó que “La labor de la Iglesia es una apuesta por la reconciliación en esos territorios y es una apuesta que va más allá del cese como un episodio temporal dentro de la guerra, lo que se busca es el cese como un comienzo del fin de la guerra”. Por su parte Raúl Rosende, uno de los líderes de la misión de la ONU en Colombia, resaltó de este proceso la fuerte presencia que tiene la Iglesia en estos territorios, la legitimidad y aceptación que tiene con las comunidades. A su vez, Jesús Flórez, integrante del Comité Diocesano, indicó que la verificación es una señal “que invita al conjunto de la sociedad colombiana y de esta región en particular a que abracemos esta gran iniciativa del cese al fuego bilateral, nacional y temprano que surge de la mesa de Cali”. El Comité Diocesano del Valle del Cauca tendrá injerencia en la zona pacífica, el Cauca y Nariño.

Jue 26 Oct 2017

El primer paso: No resistirnos a la reconciliación

Por: Mons. Luis Adriano Piedrahita Sandoval - Tenemos todavía frescas las palabras del Santo Padre invitándonos a la reconciliación y al perdón: “Quisiera, como hermano y como padre, decir: “Colombia, abre tu corazón de pueblo de Dios, déjate reconciliar. No le temas ni a la verdad ni a la justicia. Queridos colombianos: No tengan miedo a pedir y ofrecer el perdón. No se resistan a la reconciliación para acercarse, reencontrarse como hermanos y superar las enemistades. Es hora de sanar heridas, de tender puentes, de limar diferencias. Es la ahora para desactivar los odios, y renunciar a las venganzas, y abrirse a la convivencia basada en la justicia, en la verdad y en la creación de una verdadera cultura del encuentro fraterno. Que podamos habitar en armonía y fraternidad, como desea el Señor. Pidámosle ser constructores de paz, que allá donde haya odio y resentimiento, pongamos amor y misericordia” (Palabras en el parque de las Malocas de Villavicencio en el gran encuentro de oración por la reconciliación nacional). Ante los anhelos de paz que abrigamos y las dificultades que se encuentran en el camino, sería bueno que tuviéramos muy presentes las palabras del Papa, y nos sirvieran de estímulo en dar el primer paso hacia la construcción de un país reconciliado y en paz. Sabemos que la paz es el fruto y el resultado de muchas cosas, como nos lo ha recordado permanente el magisterio de la Iglesia: La Paz depende del reconocimiento como hermanos que nos tengamos, de la reconciliación, del respeto a la vida humana desde el momento de su concepción hasta su muerte natural, de la sinceridad y la verdad, del respeto a la libertad ( la libertad de los demás y del manejo responsable que cada uno hace de su propia libertad), del diálogo, de la solidaridad, especialmente con los más pobres y necesitados, del respeto a la naturaleza, de la defensa de la familia, de la justicia ( del respeto a la dignidad y a los derechos de los demás y de la distribución equitativa de la riqueza), del perdón, de la protección a los niños, del respeto a la conciencia de cada hombre, etc. Y todos esos caminos hacia la paz solo pueden nacer del corazón del hombre, del corazón de cada uno de nosotros, de corazones renovados, serenos, mansos, humildes, comprensivos, misericordiosos, capaces de amar con un amor verdadero, corazones en paz con Dios y consigo mismos. Y desde allí, desde nuestro interior nos hemos de sentir llamados a hacer gestos de paz, acciones de paz, en todas las circunstancias en las que se desenvuelve nuestra existencia humana: en nuestros hogares, haciendo de ellos lugares verdaderos de comunión, en nuestro sitio de trabajo, de estudio, de convivencia social, construyendo relaciones impregnadas de respeto, de fraternidad, de solidaridad humana, de espíritu de servicio, de tolerancia. No hay que olvidar que la construcción de la paz es un precepto del Señor para sus discípulos: “Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios” (Mt 5,9). + Luis Adriano Piedrahita Sandoval Obispo de Santa Marta

Mié 25 Oct 2017

Elementos que marcan proceso de evangelización en la diócesis de Granada

Desde el 24 de octubre y hasta el 27 de este mes la diócesis de Granada en el Meta estará reunida para celebrar su Asamblea Diocesana, este es un espacio de evaluación y planeación de trabajo para el año 2018. Según lo recordó su obispo, monseñor José Figueroa Gómez, la diócesis de Granada ha venido implementando desde hace 15 años el Plan Diocesano de Renovación y Evangelización, un proyecto pastoral que ha permitido llegar más a las comunidades y hacerlas partícipes de la tarea evangelizadora de la Iglesia. “Para mí personalmente y para las comunidades haber trabajado con este proceso diocesano ha sido una bendición y una gracia porque nos ha marcado el derrotero pastoral. En estos 15 años de acompañamiento a las comunidades he podido observar el desarrollo que la evangelización ha tenido en esta Tierra”, afirmó el obispo. Así mismo, monseñor Figueroa subrayó 4 elementos que para su criterio, han marcado transversalmente el proceso de evangelización en esta diócesis particular. Primero: Por ser este un territorio misionero, sus agentes pastorales, laicos, sacerdotes y religiosos mantienen un espíritu y compromiso misionero, hecho que ha permitido que desde el año 2016 se trabaje en una gran misión diocesana. Segundo: la misión educativa y catequética. Actualmente hay 192 docentes en 126 escuelas todas ellas dentro del ámbito diocesano. “Esto es satisfactorio para la diócesis, porque no solo es llevar la educación o la ilustración, procuramos sembrar en los estudiantes valores humanos y cristianos”. Tercero: La diócesis a través de los programas de pastoral Social ha tenido gran incidencia en la población, sobre todo en las comunidades más vulnerables (campesinos, trabajadores, jóvenes), permitiendo así acercar a las familias sobre todo aquellas que han sufrido la guerra. “Naturalmente ahora ante la perspectiva de este ambiente de reconciliación que vive el país, a la diócesis le ha correspondido 3 zonas, las mismas que van dejando de ser zonas veredales, para convertirse en zonas de reconciliación e integración. Vemos nosotros con esperanza pero también con dificultades que todo este camino que se ha empezado ha de llegar a feliz término”, expresó el obispo. Cuarto: Línea pastoral de trabajo con jóvenes y familias. La clave es abrir la puerta a los jóvenes para que ellos se sientan parte de la Iglesia con procesos de formación espiritual y educativa, para ello se trabaja con las familias. Por último el obispo de esta Jurisdicción indicó que su gran sueño es poder crear en las comunidades un gran sentido de identidad humana y cristiana, hecho que se ha ido logrando a través de procesos de formación permanente, actualizando a los distintos agentes de pastoral, comenzando desde los sacerdotes.