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Limpiemos nuestras faltas y pecados en Adviento
Tags: adviento segundo domingo de adviento
La Palabra de Dios nos invita hoy a preparar la venida del Señor removiendo los obstáculos de nuestras faltas y pecados, y avanzando en nuestra fidelidad a Él; así llegaremos a gozar de la vida plena que Él nos ofrece.
Lecturas
[icon class='fa fa-play' link=''] Primera Lectura: Baruc5,1-9[/icon]
[icon class='fa fa-play' link=''] Salmo de respuesta: 126(125),1-2ab.2cd-3.4-5.6[/icon]
[icon class='fa fa-play' link=''] Segunda Lectura: Filipenses 1,4-6.8-11[/icon]
[icon class='fa fa-play' link=''] Evangelio: Lucas 3,1-6[/icon]
[icon class='fa fa-arrow-circle-right fa-2x' link=''] CONTEXTO BÍBLICO[/icon]
En este segundo domingo de Adviento la Palabra de Dios nos invita a preparar la venida de Cristo por medio de un trabajo continuo de conversión, Juan el Bautista es el enviado de Dios para hacernos este llamamiento: es necesario que el Mesías pueda venir hasta nosotros sin ningún obstáculo. El Bautista utiliza la imagen de los que abren un camino para poder transitar y llegar al lugar deseado. Si queremos que llegue a nuestra vida el Enviado de Dios, tenemos que eliminar los cerros del orgullo, del egoísmo, de la autosuficiencia y debemos rellenar las hondonadas de nuestra pereza, de nuestros vicios y de nuestra cobardía. La llegada del Señor a nuestra vida, gracias a la calzada que le hemos preparado, es al mismo tiempo la salida gozosa de nuestro oscuro cautiverio hacia la libertad. Nos sentimos felices, como dice el estribillo del salmo, "Señor, tú cambias nuestro llanto en alegría". Así, la celebración de la Navidad será el encuentro jubiloso del hombre redimido con el Dios encarnado. Lo importante es que nos mantengamos puros y así Cristo nos encontrará irreprochables en su próxima y en su última visita.
[icon class='fa fa-play' link=''] Librería[/icon]
Accede el contenido completo del Plan Nacional de Predicación y las Moniciones y Oración Universal o de los Fieles en la Librería del episcopado colombiano.
Imagen: Ashley Jonathan Clements / CC BY-NC-ND 2.5
“El divorcio exprés”: una píldora que no sana
Lun 2 Dic 2024
Una sociedad que odia a los niños
Jue 28 Nov 2024
Vie 14 Dic 2018
Con alegría esperamos al Salvador
La alegría atraviesa el mensaje de la palabra que ilumina este camino a la celebración de la natividad de Jesús, una expresión que tiene tres niveles Pero, esa alegría se va a expresar en tres niveles distintos: El primero, lo reseñará Sofonías en la exaltación realizada a la hija de Sion, alegoría presente en los evangelios, en la figura de María, la madre del Salvador. El segundo nivel, será el propuesto por el salmista, que invita a la asamblea a exaltar de Júbilo al reconocer la presencia del Santo de Israel. El tercero, va a estar representado en la carta a los Filipenses en donde Pablo, invita a la comunidad a permanecer vivos y alegres en el Señor; de esta manera la liturgia nos va a invitar a gozarnos en el Señor en la actitud permanente de la conversión, como lo encontraremos en el relato del evangelio de Lucas. Primera lectura: Sofonías 3,14-18a Salmo: Isaías 12,2-3.4bcd.5-6 (R. cf. 6) Segunda lectura: Filipenses 4,4-7 Evangelio: Lucas 3,10-18
Jue 13 Dic 2018
Dios está en medio de ti y del pueblo
Hay un motivo concreto para no temer ni desfallecer y es que Dios está en medio de ti y en medio del pueblo. Todo ello se manifiesta en alegría, gozo y en júbilo, pero también en dos realidades concretas: conversión del corazón y en obras concretas de caridad. Esas dos respuestas son el resultado de la pregunta: ¿Qué tengo que hacer? Vive el reino: conversión y obras de caridad. Tareas: Vive con gozo y alegría los nueve días de la novena. Muestra tu conversión con una obra de caridad, especialmente con los más vulnerables. Comparte con alegría el gozo de saber que Dios vive en medio de ti y en nuestro pueblo.
Vie 7 Dic 2018
Preparemos el camino para la llegada del Mesías
Las lecturas de la Sagrada Escritura en este domingo segundo de Adviento nos trasmiten: Un pregón o anuncio de la llegada del Mesías. Una invitación a prepararle el camino y allanar sus senderos. Un modelo de espera en la figura de Juan, el Bautista Primera lectura: Baruc 5,1-9 Salmo: 126(125),1-2ab.2cd-3.4-5.6 Segunda lectura: Filipenses 1,4-6.8-11 Evangelio: Lucas 3,1-6 1. ¿Qué dice la Sagrada Escritura? Podemos partir del pasaje evangélico que ubica en la línea de la historia de la salvación el más grande acontecimiento: el nacimiento del Mesías. Juan Bautista se presenta como instrumento de Dios para el cumplimiento de la promesa divina con una vocación profética específica: “preparar los caminos del Señor” para que “toda carne vea la salvación de Dios”. Esta misión, a partir de la citación de Isaías, es descrita como hacer que lo escabroso se allane, que lo hondo se alce, que lo torcido se enderece, para que el Señor encuentre un camino llano, fácil, recto. El texto de Baruc acude a la misma imagen, pero aplicándola al pueblo de Israel que, con la conducción del Señor, podrá volver a su tierra, reunirse y caminar seguro, protegido, confiado en la acción misericordiosa de Dios. El bien conocido salmo 125 celebra justamente este retorno de Israel a la tierra prometida con tonos de alegría, de cánticos, de contemplación de la acción maravillosa de Dios. La carta de San Pablo a los Filipenses puede leerse también como una celebración de la acción de Dios en la vida de la comunidad. Al mismo tiempo es una invitación a la confianza, a la perseverancia, a la cooperación en la tarea misionera, al crecimiento permanente en el amor mutuo; todo para llegar al día de Cristo, su segunda venida, limpios, irreprochables y cargados de frutos de justicia.
Jue 6 Dic 2018
Preparemos el camino del Señor
Existen muchas formas de preparar el camino del Señor, por ejemplo: la conversión, el bautismo, la oración alegre y viviendo la auténtica alegría cristiana. Quitemos del corazón el luto y la aflicción que comprimen al ser humano porque el Señor ha estado grande con nosotros y estamos alegres: Tareas: Revisa qué quita la alegría de tu corazón. Reafirmate en el motivo de la alegría: Dios está contigo. Pregúntate cómo estás preparando el camino del Señor. ¿Ya hiciste el pesebre en tu casa? ¿Tu oración cómo va? ¿Ya preparaste la confesión de este tiempo?